IX. El Arte de la Navegación
Meteorología
La Atmosfera Terrestre
La Atmosfera Terrestre
Origen de la atmósfera
El origen de la atmósfera suele atribuirse a la presencia de gases originarios de las etapas tempranas del Sistema Solar , que quedaron atrapados en la gravedad del planeta, así como la desgasificación de la corteza terrestre a medida que se enfriaba. A eso se debe añadir el hielo y agua proveniente del impacto de cometas en la Tierra y, luego la aparición de los gases propios de la vida orgánica.

La atmósfera de la Tierra es una capa de gas que rodea el planeta Tierra y se extiende hasta el espacio exterior. Se compone principalmente de nitrógeno (alrededor del 78%) y oxígeno (alrededor del 21%), con trazas de otros gases como argón, dióxido de carbono, vapor de agua y gases nobles. La atmósfera de la Tierra se divide en varias regiones en función de su altitud.
La atmósfera terrestre realiza varias funciones cruciales para la vida en la Tierra. Estos incluyen la protección contra la energía solar y los desechos espaciales, el mantenimiento de la temperatura a través del efecto invernadero, la regulación del clima, la producción de oxígeno y el suministro de una presión atmosférica adecuada para la vida. También es un entorno en el que se producen fenómenos meteorológicos como el viento, la lluvia, la nieve y los rayos, que afectan de muchas maneras a la vida en la Tierra.
La atmosfera terrestre
La característica composición del aire permite que las longitudes de onda azules sean más visibles que las de otros colores, lo cual da un color azulado a la atmósfera terrestre desde el espacio. En el trasfondo se puede apreciar la Luna ligeramente distorsionada por el aire.
La atmósfera terrestre es la parte gaseosa de la Tierra, siendo por esto la capa más externa y menos densa del planeta. Está constituida por varios gases que varían en cantidad según la presión a diversas alturas. Esta mezcla de gases que forma la atmósfera recibe genéricamente el nombre de aire. El 75 % de masa atmosférica se encuentra en los primeros 11 km de altura, desde la superficie del mar. Los principales gases que la componen son: el oxígeno (21 %) y el nitrógeno (78 %), seguidos del argón, el dióxido de carbono y el vapor de agua.
La atmósfera y la hidrosfera constituyen el sistema de capas fluidas superficiales del planeta, cuyos movimientos dinámicos están estrechamente relacionados. Las corrientes de aire reducen drásticamente las diferencias de temperatura entre el día y la noche, distribuyendo el calor por toda la superficie del planeta. Este sistema cerrado evita que las noches sean gélidas o que los días sean extremadamente calientes.
La atmósfera protege la vida sobre la Tierra, absorbiendo gran parte de la radiación solar ultravioleta en la capa de ozono. Además, actúa como escudo protector contra los meteoritos, los cuales se desintegran en polvo a causa de la fricción que sufren al hacer contacto con el aire.
Durante millones de años, la vida ha transformado, una y otra vez, la composición de la atmósfera. Por ejemplo; su considerable cantidad de oxígeno libre es posible gracias a las formas de vida —como son las plantas— que convierten el dióxido de carbono en oxígeno, el cual es a su vez respirable por las demás formas de vida, tales como los seres humanos y los animales en general.

La atmósfera son las distintas capas de gases que recubren los astros celestes, atraídos por su gravedad hasta estabilizarse a su alrededor, alcanzando distintas alturas. Su composición química puede ser muy variada y, en el caso de la de nuestro planeta Tierra, contiene el aire que respiramos y los gases que permiten la existencia de la vida.
A la atmósfera de la Tierra se la conoce como atmósfera terrestre y en ella se centrará este artículo. La atmósfera terrestre es única en su composición en el Sistema Solar, ya que contiene la combinación apropiada de gases importantes para que la vida tenga lugar en la superficie del planeta.
En la atmósfera se dan las condiciones de temperatura y presión que permiten el ciclo hidrológico, se encuentra la capa de ozono que escuda al planeta de la radiación solar, y se produce la fricción que reduce a polvo los meteoritos que provengan del espacio.
La atmósfera terrestre se encuentra alrededor de la superficie del planeta , extendiéndose desde el suelo hasta unos 10.000 kilómetros alrededor del planeta, en diversas capas de gases más o menos uniformes.
El 75% de su masa gaseosa se ubica en los primeros 11 km de elevación desde la superficie del mar , y a medida que gana altura gana también una importante medida de presión.
Composición de la atmósfera
El nitrógeno es el elemento que más abunda en la atmósfera.
La composición de la atmósfera ha variado a lo largo de la historia del planeta, sobre todo desde la aparición de los seres vivos , que consumimos ciertos gases y producimos otros. Sin embargo, su composición es mayoritariamente de nitrógeno (78%) y oxígeno (21%), junto con otros gases importantes como el ozono, el hidrógeno , el dióxido de carbono, el argón y otros gases nobles . También contiene una importante presencia de vapor de agua (H2O).

Regiones de la atmósfera
Comúnmente se distinguen dos regiones en la atmósfera terrestre, que son:
- Homósfera. Su nombre proviene de su composición constante y regular, que ocupa los primeros 100 km de la atmósfera a partir del suelo. Allí se encuentran todos los gases necesarios para la vida en distinta proporción.
-
Heterósfera.
Su nombre proviene del hecho de estar estratificada en capas distintas de gases, que varían conforme a la altura y la presión:
- 80-400 kilómetros de altura: nitrógeno molecular (N2).
- 400-1100 kilómetros de altura: oxígeno atómico (O).
- 1100-3500 kilómetros de altura: helio (He).
- 3500-10.000 kilómetros de altura: hidrógeno (H).
Capas de la atmósfera terrestre y la temperatura
La temperatura de la atmósfera terrestre varía con la altitud. La relación entre la altitud y la temperatura es distinta dependiendo de la capa atmosférica considerada: troposfera, estratosfera, mesosfera, termosfera y exosfera. A esto se le llama gradiente térmico atmosférico.
Las divisiones entre una capa y otra se denominan respectivamente tropopausa, estratopausa, mesopausa y termopausa.
Sus principales características son:
- Su espesor alcanza desde la superficie terrestre (tanto terrestre como acuática o marina) hasta una altitud variable entre los 6 km en las zonas polares y los 18 o 20 km en la zona intertropical.
- A medida que se sube, disminuye la temperatura en la troposfera, salvo algunos casos de inversión térmica que siempre se deben a causas locales o regionalmente determinadas.
- En la troposfera suceden los fenómenos que componen lo que llamamos tiempo meteorológico.
- La capa inferior de la troposfera se denomina la capa geográfica, que es donde se producen la mayor proporción de fenómenos geográficos, tanto en el campo de la geografía física como en el campo de la geografía humana.
- La temperatura mínima que se alcanza al final de la troposfera es de –50 °C aproximadamente.

La atmósfera terrestre se compone de varias capas que se extienden hacia arriba desde la superficie de la Tierra. Estas capas son:
-
Troposfera: Es la capa más cercana a la superficie terrestre, se extiende desde la superficie hasta aproximadamente 8-15 kilómetros de altitud, dependiendo de la ubicación geográfica y la estación del año. Es la capa donde ocurre la mayor parte del clima y donde se encuentran la mayoría de los seres vivos. A medida que se asciende en la troposfera, la temperatura generalmente disminuye.
-
Estratósfera: Se encuentra sobre la troposfera y se extiende aproximadamente desde los 15 kilómetros hasta los 50 kilómetros de altitud. En esta capa se encuentra la capa de ozono, que absorbe gran parte de la radiación ultravioleta del sol. La temperatura aumenta en la estratósfera debido a la presencia de ozono. Sin embargo, se trata de una capa muy enrarecida, muy tenue.
-
Ozonosfera : Se denomina capa de ozono, u ozonosfera, a la zona de la estratosfera terrestre que contiene una concentración relativamente alta de ozono. Esta capa, que se extiende aproximadamente de los 15 km a los 40 km de altitud, reúne el 90 % del ozono presente en la atmósfera y absorbe del 97 % al 99 % de la radiación ultravioleta de alta frecuencia.
-
Mesósfera: Está por encima de la estratósfera y se extiende desde los 50 kilómetros hasta aproximadamente los 85 kilómetros de altitud. Es la capa más fría de la atmósfera, con temperaturas que disminuyen a medida que se asciende.
-
Termósfera o Ionosfera: Se encuentra por encima de la mesósfera y se extiende desde aproximadamente los 85 kilómetros hasta los 600 kilómetros de altitud. La temperatura en la termósfera aumenta significativamente debido a la interacción con la radiación solar, pero como la densidad del aire es muy baja, la temperatura real no se siente como caliente.
-
Exósfera: Es la capa más externa de la atmósfera terrestre y se encuentra por encima de la termósfera. Se extiende desde aproximadamente los 600 kilómetros hasta el límite superior de la atmósfera, que es difícil de definir debido a que gradualmente se mezcla con el espacio interplanetario. En la exósfera, los gases se dispersan y se vuelven cada vez más raros.
Cabe destacar que estas capas no tienen límites claros y definidos, sino que se mezclan gradualmente entre sí, y la altitud de cada capa puede variar debido a diversos factores como la ubicación geográfica, la estación del año, la actividad solar y otros fenómenos atmosféricos. Sin embargo, estas capas proporcionan una forma general de entender la estructura de la atmósfera terrestre.
1. Troposfera
La troposfera es la capa más baja de la atmósfera terrestre y se extiende desde la superficie de la Tierra hasta aproximadamente 8-15 kilómetros de altitud, dependiendo de la ubicación geográfica y la estación del año. Es la capa donde ocurre la mayor parte del clima y donde se encuentran la mayoría de los seres vivos, incluyendo a los seres humanos.
En la troposfera, la temperatura generalmente disminuye a medida que se asciende en altura. Esto se debe a que la troposfera está en contacto directo con la superficie terrestre y se calienta principalmente por la radiación infrarroja que emite la Tierra. A medida que se asciende en altitud, la presión atmosférica disminuye y la temperatura también disminuye en lo que se conoce como gradiente térmico negativo.
La troposfera es donde ocurren la mayoría de los fenómenos meteorológicos, como las nubes, las lluvias, las tormentas y los vientos. La mayor parte del vapor de agua en la atmósfera también se encuentra en esta capa, lo que la hace crucial para el ciclo del agua y el clima de la Tierra.
La altura de la troposfera varía dependiendo de la ubicación geográfica y la estación del año. En latitudes más bajas, como en las regiones ecuatoriales, la troposfera tiende a ser más alta, mientras que en latitudes más altas, como en los polos, tiende a ser más baja. Durante la temporada de invierno en las regiones polares, la troposfera puede descender a altitudes más bajas debido a la disminución de la temperatura. En general, la troposfera es la capa de la atmósfera terrestre en la que vivimos y experimentamos el clima cotidiano.

2. Estratosfera
La estratosfera es una capa de la atmósfera terrestre que se encuentra por encima de la troposfera y se extiende aproximadamente desde los 15-20 kilómetros de altitud hasta alrededor de 50 kilómetros, aunque estos límites pueden variar según la ubicación geográfica y la estación del año.
Una característica importante de la estratosfera es que contiene una capa especial llamada ozonosfera o capa de ozono, que se encuentra aproximadamente entre los 20 y 30 kilómetros de altitud. La ozonosfera contiene una concentración alta de ozono (O3), que forma una capa que absorbe gran parte de la radiación ultravioleta (UV) del Sol. Esto tiene un efecto protector para la vida en la Tierra, ya que la radiación UV dañina puede causar problemas de salud en los seres humanos y dañar el ADN de los organismos, incluyendo las plantas y los animales.
La temperatura en la estratosfera generalmente aumenta a medida que se asciende en altitud, debido a la absorción de la radiación ultravioleta por la capa de ozono. Esto hace que la estratosfera sea más estable y menos turbulenta que la troposfera, y es por ello que los aviones comerciales vuelan a altitudes de la estratosfera para aprovechar su estabilidad y eficiencia en el consumo de combustible.
La estratosfera también es el lugar donde se encuentran algunas características atmosféricas notables, como los vórtices polares, que son áreas de bajas presiones y vientos circulares que se forman en las regiones polares durante el invierno. Además, es el hogar de las nubes nacaradas, también conocidas como nubes polares estratosféricas, que son nubes de alta altitud que se forman en condiciones extremadamente frías y crean colores brillantes y espectaculares en el cielo.
La estratosfera juega un papel importante en la regulación del clima y la protección de la vida en la Tierra, y ha sido objeto de investigación científica para comprender su composición, dinámica y su interacción con otras capas de la atmósfera y con el cambio climático global.

a. Ozonosfera
El ozono (O3) se encuentra distribuido en varias capas de la atmósfera, pero la concentración más alta de ozono se encuentra en una región específica llamada "capa de ozono" en la estratosfera.
La capa de ozono es una región de la estratosfera que se encuentra aproximadamente entre los 10 y 50 kilómetros de altitud. Esta capa contiene una concentración alta de ozono, que se forma por la acción de la radiación ultravioleta del Sol sobre las moléculas de oxígeno (O2) en la atmósfera. El ozono absorbe la radiación ultravioleta del Sol, especialmente la radiación ultravioleta de tipo B (UVB), que es dañina para la vida en la Tierra.

La capa de ozono juega un papel crucial en la protección de la vida en la Tierra, ya que actúa como una "capa protectora" que absorbe gran parte de la radiación ultravioleta dañina del Sol, evitando que alcance la superficie terrestre. Esta radiación ultravioleta puede causar daños en el ADN de los organismos, incluyendo a los seres humanos, lo que puede tener efectos negativos en la salud, como aumento del riesgo de cáncer de piel, daños oculares, y afectar a los ecosistemas en general.
Sin embargo, en las últimas décadas ha habido preocupación por la disminución de la capa de ozono debido a la liberación de sustancias químicas en la atmósfera, como los clorofluorocarbonos (CFCs), que han sido utilizados en aplicaciones industriales y domésticas. Estas sustancias químicas pueden destruir el ozono en la estratosfera y han llevado a la formación de lo que se conoce como el "agujero de ozono" sobre las regiones polares, especialmente en la región de la Antártida, durante la primavera austral.
El agotamiento de la capa de ozono ha llevado a acciones internacionales para reducir y eliminar el uso de sustancias químicas dañinas para el ozono. El Protocolo de Montreal, un acuerdo internacional firmado en 1987, ha sido uno de los principales esfuerzos para la protección de la capa de ozono, y ha llevado a una disminución de la producción y uso de sustancias químicas que agotan el ozono en la atmósfera. Como resultado, se ha observado una recuperación gradual de la capa de ozono en algunas áreas, lo que destaca la importancia de tomar acciones para proteger y preservar esta capa esencial de la atmósfera terrestre.
3. Mesósfera
La mesosfera es una de las capas de la atmósfera terrestre, situada por encima de la estratosfera y por debajo de la termosfera. Se extiende aproximadamente desde los 50 kilómetros de altitud hasta los 85 kilómetros de altitud.
La mesosfera es la tercera capa más alta de la atmósfera terrestre y es conocida por ser la capa más fría de la atmósfera. Las temperaturas en la mesosfera disminuyen con la altitud, alcanzando temperaturas extremadamente bajas, llegando incluso a alcanzar los -90°C o más frías, dependiendo de la ubicación y la estación del año.
Esta capa de la atmósfera también es conocida por ser la región donde ocurren fenómenos como las auroras polares y las nubes noctilucentes. Las auroras polares son fenómenos luminosos que ocurren en las regiones polares de la Tierra debido a la interacción de partículas cargadas procedentes del espacio con la atmósfera terrestre, y la mesosfera es una de las capas donde ocurren. Las nubes noctilucentes son nubes muy altas compuestas de pequeñas partículas de hielo que se forman en la mesosfera y pueden ser visibles en las latitudes medias y altas durante el verano.
La mesosfera también es una capa de la atmósfera que se encuentra en la ruta de los meteoroides que ingresan a la atmósfera terrestre. Estos meteoroides se queman al entrar en la mesosfera debido a la fricción con las capas de la atmósfera, creando lo que conocemos como estrellas fugaces o meteoros.
Debido a las bajas temperaturas y a la falta de oxígeno, la mesosfera es una capa de la atmósfera que no es accesible para aeronaves tripuladas y representa un desafío para la exploración espacial. Sin embargo, se han realizado estudios mediante globos estratosféricos y cohetes de investigación para estudiar las características y propiedades de la mesosfera, lo que ha contribuido a nuestro entendimiento de esta capa de la atmósfera terrestre.

4. Termósfera o Ionosfera
La mesosfera es una de las capas de la atmósfera terrestre, situada por encima de la estratosfera y por debajo de la termosfera. Se extiende aproximadamente desde los 50 kilómetros de altitud hasta los 85 kilómetros de altitud.
La mesosfera es la tercera capa más alta de la atmósfera terrestre y es conocida por ser la capa más fría de la atmósfera. Las temperaturas en la mesosfera disminuyen con la altitud, alcanzando temperaturas extremadamente bajas, llegando incluso a alcanzar los -90°C o más frías, dependiendo de la ubicación y la estación del año.
Esta capa de la atmósfera también es conocida por ser la región donde ocurren fenómenos como las auroras polares y las nubes noctilucentes. Las auroras polares son fenómenos luminosos que ocurren en las regiones polares de la Tierra debido a la interacción de partículas cargadas procedentes del espacio con la atmósfera terrestre, y la mesosfera es una de las capas donde ocurren. Las nubes noctilucentes son nubes muy altas compuestas de pequeñas partículas de hielo que se forman en la mesosfera y pueden ser visibles en las latitudes medias y altas durante el verano.
La mesosfera también es una capa de la atmósfera que se encuentra en la ruta de los meteoroides que ingresan a la atmósfera terrestre. Estos meteoroides se queman al entrar en la mesosfera debido a la fricción con las capas de la atmósfera, creando lo que conocemos como estrellas fugaces o meteoros.
Debido a las bajas temperaturas y a la falta de oxígeno, la mesosfera es una capa de la atmósfera que no es accesible para aeronaves tripuladas y representa un desafío para la exploración espacial. Sin embargo, se han realizado estudios mediante globos estratosféricos y cohetes de investigación para estudiar las características y propiedades de la mesosfera, lo que ha contribuido a nuestro entendimiento de esta capa de la atmósfera terrestre.

5. Exósfera
La exosfera es la capa más externa y menos densa de la atmósfera terrestre. Se encuentra por encima de la termosfera/ionosfera y es la capa más alejada de la superficie terrestre. La exosfera se extiende desde el límite superior de la atmósfera terrestre, que varía dependiendo de varios factores como la actividad solar y la altitud geográfica, hasta el espacio exterior.
Una de las características principales de la exosfera es su baja densidad. La concentración de moléculas de gas en la exosfera es extremadamente baja, con una densidad tan baja que las moléculas apenas interactúan entre sí. De hecho, la exosfera se considera prácticamente como un vacío en términos de densidad de gas.
En la exosfera, las moléculas de gas, como hidrógeno, helio, oxígeno y dióxido de carbono, tienen una energía cinética muy alta debido a la intensa radiación solar. Sin embargo, debido a la baja densidad, las colisiones entre moléculas son poco frecuentes y las moléculas pueden moverse a grandes distancias antes de interactuar con otra partícula.
Además, en la exosfera ocurre lo que se conoce como escape atmosférico, que es la pérdida de partículas de gas de la atmósfera terrestre hacia el espacio exterior. Debido a la alta energía cinética de las moléculas en la exosfera, algunas de ellas pueden adquirir la velocidad suficiente para escapar de la gravedad terrestre y ser expulsadas al espacio. Este proceso de escape atmosférico es más relevante para gases ligeros, como el hidrógeno y el helio, y puede tener un papel importante en la evolución y composición de la atmósfera terrestre a lo largo de la historia del planeta.
En resumen, la exosfera es la capa más externa de la atmósfera terrestre, caracterizada por su baja densidad, alta energía cinética de las moléculas y la pérdida de partículas de gas hacia el espacio exterior. Es una capa de la atmósfera que ha sido objeto de estudio y seguimiento para comprender mejor la interacción de la Tierra con el espacio exterior y su influencia en la evolución de la atmósfera terrestre.

La Magnetosfera
La magnetosfera es una región protectora de la atmósfera terrestre que se extiende desde la ionosfera hasta el espacio exterior y está influenciada por el campo magnético terrestre. Es una capa importante de la atmósfera que tiene propiedades magnéticas y es esencial para la protección de la Tierra contra la radiación solar y cósmica.
La magnetosfera se forma debido a la interacción del campo magnético terrestre con el viento solar, que es una corriente constante de partículas cargadas que fluye desde el Sol. El campo magnético terrestre desvía el viento solar y crea una región de espacio en forma de una burbuja, que rodea la Tierra y se conoce como magnetosfera.
Una de las funciones principales de la magnetosfera es proteger la atmósfera terrestre y la superficie del planeta de la radiación perjudicial del viento solar. Las partículas cargadas del viento solar, como electrones y protones, pueden tener efectos dañinos en la atmósfera y la superficie terrestre, incluyendo la erosión de la capa de ozono y la alteración de la composición química de la atmósfera.

Sin embargo, la magnetosfera actúa como una barrera protectora, desviando la mayoría de las partículas cargadas del viento solar alrededor de la Tierra y evitando que lleguen a la superficie.
La magnetosfera también tiene un papel importante en la generación de auroras, que son fenómenos luminosos que ocurren en las regiones polares de la Tierra. Las auroras son causadas por la interacción de partículas cargadas del viento solar con la magnetosfera terrestre, que producen luces de colores característicos en la atmósfera. Las auroras son un espectáculo natural impresionante y son un indicador visible de la presencia y la actividad de la magnetosfera.
La magnetosfera es una capa compleja y dinámica de la atmósfera terrestre que ha sido objeto de investigación científica intensiva para comprender su funcionamiento y su papel en la protección de la Tierra contra la radiación del espacio exterior. Las misiones espaciales y los estudios in situ han proporcionado valiosa información sobre la magnetosfera y su interacción con el entorno espacial, lo que ha llevado a un mayor entendimiento de este importante componente de la atmósfera terrestre.El
El airglow
También conocido como luminiscencia nocturna, es un fenómeno natural que produce una emisión de luz en la atmósfera terrestre durante la noche. Esta emisión de luz se produce debido a diversas reacciones químicas y físicas en la atmósfera superior, y puede ser observada como una tenue luminosidad en la oscuridad del cielo nocturno.
El airglow se compone de varias capas distintas en la atmósfera superior, cada una de las cuales está asociada con diferentes procesos químicos y altitudes. Estas capas de airglow son:
-
Mesosfera inferior: Esta capa se encuentra aproximadamente a una altitud de 80-90 kilómetros sobre la superficie de la Tierra. La emisión de airglow en esta capa es principalmente causada por la reacción química del oxígeno molecular (O2) y el nitrógeno molecular (N2) con partículas energéticas provenientes del espacio exterior, como rayos cósmicos y partículas solares.
-
Mesosfera superior: Esta capa se encuentra a altitudes de alrededor de 90-100 kilómetros sobre la superficie terrestre. La emisión de airglow en esta capa es principalmente causada por la reacción química del hidroxilo (OH) con partículas energéticas del espacio exterior.
-
Termosfera inferior: Esta capa se encuentra a altitudes de alrededor de 100-150 kilómetros sobre la superficie terrestre. La emisión de airglow en esta capa está relacionada con la interacción de partículas energéticas del espacio exterior, como electrones y iones, con la atmósfera superior.
-
Termosfera superior: Esta capa se encuentra a altitudes de alrededor de 150-600 kilómetros sobre la superficie terrestre. La emisión de airglow en esta capa está relacionada con la excitación y desexcitación de átomos y moléculas en la atmósfera superior debido a la interacción con partículas energéticas del espacio exterior.
Cabe destacar que las capas de airglow son regiones difusas y suelen tener límites altitudinales poco definidos. Además, la intensidad y color del airglow pueden variar dependiendo de factores como la ubicación geográfica, la actividad solar, la actividad geomagnética y las condiciones atmosféricas locales. El estudio del airglow es importante para comprender la dinámica y composición de la atmósfera superior de la Tierra, así como su interacción con el espacio exterior.

La dinámica de la atmósfera
Se refiere al estudio del movimiento y comportamiento de los gases que conforman la atmósfera terrestre. La atmósfera es una capa de gases que rodea la Tierra y está compuesta principalmente de nitrógeno (aproximadamente el 78% en volumen), oxígeno (aproximadamente el 21% en volumen), argón, dióxido de carbono, vapor de agua y otros gases en cantidades mucho menores.
La dinámica de la atmósfera es impulsada por varios factores, incluyendo la radiación solar, la rotación de la Tierra, la variación de la temperatura, la presión y la humedad en diferentes regiones del globo, y la interacción con la superficie terrestre y los océanos. Los procesos dinámicos de la atmósfera incluyen el movimiento horizontal y vertical del aire, la formación de sistemas de alta y baja presión, la circulación atmosférica a gran escala, los vientos, las corrientes en chorro, la convección, la advección, la difusión, y otros procesos físicos y químicos.
La atmósfera terrestre se divide en varias capas con características distintas, como la troposfera, la estratosfera, la mesosfera, la termosfera y la exosfera, cada una con su propia dinámica y comportamiento. Por ejemplo, en la troposfera, que es la capa más baja de la atmósfera y se extiende desde la superficie terrestre hasta aproximadamente 8-15 kilómetros de altitud, ocurre la mayor parte de los fenómenos meteorológicos, como la formación de nubes, la lluvia, la nieve y los vientos. En la estratosfera, que se encuentra por encima de la troposfera, se encuentra la capa de ozono, que juega un papel importante en la protección de la vida en la Tierra de la radiación ultravioleta del sol.
La dinámica de la atmósfera también está fuertemente influenciada por los patrones climáticos globales, como el sistema de circulación atmosférica denominado "Células de Hadley" y otros sistemas de circulación atmosférica a gran escala, que influyen en los patrones de precipitación, los vientos dominantes y otros fenómenos meteorológicos en diferentes regiones del mundo.
El estudio de la dinámica de la atmósfera es esencial para comprender el clima, la meteorología, la calidad del aire, la contaminación atmosférica, la predicción del tiempo, el transporte aéreo, la dispersión de contaminantes, y muchos otros aspectos relacionados con la interacción entre la atmósfera y la superficie terrestre. Los científicos utilizan modelos matemáticos, mediciones en tiempo real, observaciones satelitales, y otros enfoques para investigar y comprender la compleja dinámica de la atmósfera terrestre.

Velocidad constante en caída libre
Un cuerpo en caída libre dentro de la atmósfera puede tener velocidad decreciente, dado que la atracción gravitacional produce un movimiento uniformemente acelerado solamente en el vacío.
Si un cuerpo comienza a caer atravesando la atmósfera, se va acelerando hasta que su peso es igual a la fuerza de fricción que se produce por el desplazamiento dentro del aire. En ese momento deja de acelerar, y su velocidad comienza a decrecer a medida que la atmósfera aumenta su densidad, provocando una fuerza de fricción mayor.
Puede desacelerar la velocidad de caída no solo por la densidad de la atmósfera sino también por la variación del área de sección atravesada, lo que aumenta la fricción. Los acróbatas aéreos de caída libre pueden variar su velocidad de caída acelerando o desacelerando: si se desplazan de cabeza aceleran hasta equilibrar su peso, y si abren los brazos y piernas desaceleran.
Ciclos biogeoquímicos
La atmósfera tiene una gran importancia en los ciclos biogeoquímicos. La composición actual de la atmósfera es debida a la actividad de la biosfera (fotosíntesis), controla el clima y el ambiente en el que vivimos y engloba dos de los tres elementos esenciales (nitrógeno y carbono); aparte del oxígeno.
La actividad del hombre está modificando su composición, como el aumento del dióxido de carbono o el metano, causando el efecto invernadero o el óxido de nitrógeno, causando la lluvia ácida.
Filtro de las radiaciones solares
Las radiaciones solares nocivas, como la ultravioleta, son absorbidas casi en un 90 % por la capa de ozono de la estratosfera. La actividad mutágena de dicha radiación es muy elevada, originado dímeros de timina que inducen la aparición de melanoma en la piel. Sin ese filtro, la vida fuera de la protección del agua no sería posible.
Efecto invernadero
Gracias a la atmósfera, la Tierra no tiene grandes contrastes térmicos; debido al efecto invernadero natural, que está producido por todos los componentes gaseosos del aire, que absorben gran parte de la radiación infrarroja re-emitida por la superficie terrestre; este calor queda retenido en la atmósfera en vez de perderse en el espacio gracias a dos características físicas del aire: su compresibilidad, que comprime el aire en contacto con la superficie terrestre por el propio peso de la atmósfera lo que, a su vez, determina la mayor absorción de calor del aire sometido a mayor presión y la diatermancia, que significa que la atmósfera deja pasar a la radiación solar casi sin calentarse (la absorción directa de calor procedente de los rayos solares es muy escasa), mientras que absorbe gran cantidad del calor oscuro ( 3 ) reenviado por la superficie terrestre y, sobre todo, acuática de nuestro planeta. Este efecto invernadero tiene un papel clave en las suaves temperaturas medias del planeta. Así, teniendo en cuenta la constante solar (calorías que llegan a la superficie de la Tierra por centímetro cuadrado y por minuto), la temperatura media del planeta sería de -27 °C, incompatible con la vida tal y como la conocemos; en cambio, su valor real es de unos 15 °C debido precisamente al efecto invernadero.
Las grandes historias tienen una personalidad . Considere contar una gran historia que proporciona personalidad. Escribir una historia con personalidad para clientes potenciales ayudará a hacer una conexión de relación. Esto aparece en pequeñas peculiaridades como opciones de palabras o frases. Escribe desde tu punto de vista, no desde la experiencia de otra persona.
Se conoce como efecto invernadero a la presencia de gases atmosféricos como el
dióxido de carbono
que forman una capa densa en la atmósfera e impiden el escape del calor terrestre (a semejanza de las paredes de un invernadero). Este efecto es vital para la preservación del calor terrestre, indispensable para la vida.

El efecto invernadero es un proceso natural que ocurre en la atmósfera de la Tierra , donde ciertos gases (como el dióxido de carbono , el metano y el vapor de agua) atrapan el calor del Sol y lo retienen cerca de la superficie.
Este efecto, similar al que producen los invernaderos en la agricultura, permite mantener la temperatura de la Tierra a un nivel adecuado para el desarrollo de la vida.
Sin embargo, en las últimas décadas la actividad humana ha producido un aumento significativo de gases de efecto invernadero en la atmósfera . Se cree que ese exceso de gases de efecto invernadero es el que estaría causando el aumento de la temperatura promedio de la atmósfera, lo que a su vez produce graves consecuencias para la dinámica climática, la biodiversidad y la calidad de vida en el planeta.
PUNTOS CLAVE
- Es un proceso natural que ocurre en la atmósfera del planeta y que es necesario para el desarrollo de la vida en la Tierra.
- Consiste en la acumulación de gases en la atmósfera que son capaces de retener el calor del Sol.
- El exceso de acumulación de gases genera un desequilibrio en el efecto invernadero y, como consecuencia, se concentra mayor calor en la atmósfera.
- El desequilibrio del efecto invernadero es generado por la actividad del ser humano, como la excesiva quema de combustibles fósiles y la disminución de los bosques por la deforestación indiscriminada, entre otras actividades.

Un invernadero es una construcción que permite entrar el calor del Sol pero que, por la ausencia de ventilación, no lo deja salir. Los invernaderos se utilizan para cultivar vegetales que requieren altos niveles de temperatura y humedad.
La atmósfera terrestre produce este mismo efecto ya que permite que los rayos solares lleguen a la superficie terrestre, pero luego retiene parcialmente su calor . Gracias a que la atmósfera funciona como un invernadero, en la superficie terrestre puede desarrollarse la vida que requiere cierta temperatura mínima para sobrevivir.
Si los gases de efecto invernadero no retuvieran ese calor, se cree que la temperatura promedio del planeta sería 30 grados más baja que en la actualidad.

Causas del incremento del efecto invernadero
Otros gases de efecto invernadero también han aumentado su concentración en los últimos años. El metano, por ejemplo, es liberado por la actividad ganadera a través de la materia fecal de los animales y por la mala gestión de los residuos que, al descomponerse, también liberan este gas que se acumula en la atmósfera.

La deforestación provoca que el CO2 permanezca más tiempo en la Tierra.
El efecto invernadero producido por la actividad humana es causado por el exceso de gases de efecto invernadero (dióxido de carbono, metano y vapor de agua, principalmente) en la atmósfera.
La quema de combustibles fósiles, como el petróleo , el gas y el carbón, libera dióxido de carbono a la atmósfera. El uso de combustibles fósiles para la producción de energía, el transporte y la industria son las principales causas de que se emita este tipo de gases.
Por esta razón los gases de efecto invernadero en la atmósfera se incrementaron rápidamente desde mediados del siglo XVIII, cuando comenzó a acelerarse e intensificarse la Segunda Revolución Industrial .
El avance de la deforestación a nivel mundial también explica el aumento de la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera. Los árboles captan dióxido de carbono y lo convierten en oxígeno a través de la fotosíntesis . La disminución de la superficie boscosa a nivel mundial reduce la captación de dióxido de carbono, lo que produce que este gas permanezca por más tiempo en la atmósfera.
Consecuencias del incremento del efecto invernadero

La consecuencia directa del incremento del efecto invernadero es el cambio climático global que, a su vez, genera una serie de consecuencias ecológicas y ambientales. Entre las más significativas, se destacan las siguientes:
- Cambios en los patrones de precipitaciones. El cambio climático ha alterado la dinámica de las lluvias a nivel mundial, lo que ha llevado a inundaciones y sequías más frecuentes e intensas en diferentes regiones del mundo.
- Cambios en los ecosistemas. El cambio climático ha producido severos cambios ecológicos que incluyen la pérdida de la biodiversidad y la extinción de muchas especies.
- Aumento de la temperatura de los océanos. El cambio climático afecta la vida marina y los ecosistemas acuáticos. Además favorece el aumento en la frecuencia e intensidad de fenómenos climáticos extremos que se alimentan de agua cálida, como los huracanes y las tormentas tropicales.
- Deterioro de la salud humana. El cambio climático afecta la salud humana por la contaminación del aire, la exposición a altas temperaturas y olas de calor, la falta de agua, las inundaciones, la transmisión de enfermedades, entre otras causas.
Gases de efecto invernadero
Elija una imagen vibrante y escriba un párrafo inspirador al respecto.
No tiene que ser largo, pero debe reforzar su imagen.

El principal gas de efecto invernadero es el vapor de agua . El segundo más importante es el dióxido de carbono, a pesar de ser un gas que compone un mínimo porcentaje de la atmósfera (solo un 0,035 %, es decir, por cada millón de partículas solo 350 son dióxido de carbono). Cualquier variación en la cantidad de este gas en la atmósfera tiene un profundo impacto en el efecto invernadero, ya que una pequeña cantidad agregada puede producir importantes efectos.
El Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC por sus siglas en inglés) considera que aproximadamente el 50 % de las emisiones de dióxido de carbono permanecerán en la atmósfera durante varias décadas , y alrededor del 20% permanecerá por varios miles de años. Estos porcentajes pueden variar según las condiciones atmosféricas y la forma en la que se emiten y se absorben estas emisiones.
Acuerdos internacionales sobre el efecto invernadero
Diversos países firmaron acuerdos para trabajar en conjunto sobre el cambio climático. Algunos de los más importantes fueron:
- Protocolo de Kioto (1997). Fue el primer acuerdo internacional sobre cambio climático. Este tratado requería que los países industrializados redujeran sus emisiones de gases de efecto invernadero por debajo de los niveles de 1990.
- Acuerdo de París (2015). Fue un acuerdo en el que todos los países se comprometieron a luchar por limitar el aumento de la temperatura global a menos de 2ºC por encima de las temperaturas preindustriales. Se acordó que los países se comprometerían a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero cada cinco años, y se estableció un fondo para ayudar a los países más vulnerables frente al cambio climático.
Evolución
La composición de la atmósfera terrestre no ha sido siempre la misma, sino que ha variado a lo largo de la vida del planeta por diversas causas. Además, los elementos ligeros escapan continuamente de la gravedad terrestre; de hecho, en la actualidad se fugan unos tres kilogramos de hidrógeno y 50 gramos de helio cada segundo, cifras que en tiempos geológicos (millones de años) resultan decisivas, aunque compensan, al menos en gran parte, la materia recibida del sol en forma de energía. 4 Esta compensación también tiende a equilibrarse en el tiempo, de acuerdo a la mayor o menor energía solar recibida, generando un ciclo complejo, diario, estacional y de ciclos más largos (de acuerdo con la mayor o menor actividad solar) y una respuesta equivalente de la atmósfera en el almacenamiento de dicha energía y su posterior liberación en el espacio. Por ejemplo, la formación del ozono (O3) en la capa denominada precisamente, ozonosfera, absorbe la mayor parte de la radiación ultravioleta recibida del sol pero cede esa energía al volverse a transformar durante la noche en oxígeno (O2).
Se pueden establecer diferentes etapas evolutivas de la atmósfera según su composición:
Origen
La atmósfera se deriva de diversas fuentes, estaba y está condicionada por factores como:
- La pérdida de la gruesa capa de gases original (primera atmósfera), originada directamente de la nebulosa que forma el sistema solar (H y He).
- El aumento de la masa de la Tierra lo que generó un aumento de la gravedad terrestre.
- El enfriamiento de la Tierra.
- La composición atmósfera primitiva.
- La desgasificación de la corteza terrestre.
- La formación de una capa de gases: atmósfera primitiva . Esta atmósfera, tiene una composición parecida a las emisiones volcánicas actuales, donde dominarían el N2, CO2, HCl y SO2.
- Algunos gases y el H2O de procedencia externa (cometas).
Etapa prebiótica
Antes de la vida, la atmósfera sufrió algunos cambios importantes:
- Condensación del vapor de agua: formación de los océanos y disolución de gases en ellos (CO2, HCl y SO2).
- Principal gas de la atmósfera de acuerdo a la composición de la misma: Nitrógeno (N2).
- No había oxígeno (O2).
Etapa microbiológica
Etapa con la aparición de las primeras bacterias anaeróbicas (que usaban H y H2S) y fotosintéticas (Bacterias del azufre y cianobacterias):
- Comenzó la producción de O2 del océano.
- El O2 producido se utilizó para oxidar las sustancias reducidas del océano y de la corteza terrestre. Prueba de ello son la deposición de las formaciones de hierro en bandas o capas:
Fe+3 + O2 → Fe2O3
- Una vez oxidadas las sustancias, empezó la acumulación de O2 en la atmósfera.
Etapa biológica
Etapa con la aparición de organismos eucariotas con fotosíntesis más eficiente:
- Aumento del O2 en la atmósfera hasta la concentración actual (21 %).
- Formación de la capa de O3 (protección de la radiación ultravioleta del Sol), permitiendo la colonización, por parte de los seres vivos, de las tierras emergidas.

Superar la resistencia de la atmósfera es uno de los principales retos de los viajes espaciales, tanto como vencer la gravedad de manera sostenida. El roce que sufre un trasbordador espacial durante su despegue en las capas iniciales de la atmósfera puede generar calentamiento, desviación de la trayectoria e incluso rotura de materiales. En cambio, una vez en las capas externas, la baja densidad de material gaseoso permitirá el desplazamiento de manera mucho más amable.
Fuego de San Telmo
El fuego de San Telmo o Santelmo es un meteoro ígneo que consiste en una descarga de efecto corona electroluminiscente provocada por la ionización del aire dentro del fuerte campo eléctrico que originan las tormentas eléctricas. Estaba considerado como un buen augurio por los marineros españoles durante la conquista de América.

Historia y significado
Aunque se le llama «fuego», es en realidad un plasma de baja densidad y relativamente baja temperatura provocado por una enorme diferencia de potencial eléctrico atmosférica que sobrepasa el valor de ruptura dieléctrica del aire, en torno a 3 MV/m.
Este fenómeno toma su nombre de san Erasmo de Formia ( Sanct’ Elmo ), patrón de los marineros, quienes habían observado el fenómeno desde la antigüedad y creían que su aparición era de mal agüero; aunque otros marineros lo asociaban con una forma de protección de parte de su patrono. Los marineros españoles harían referencia a san Pedro González Telmo.
Físicamente, es un resplandor brillante blanco-azulado, que en algunas circunstancias tiene aspecto de fuego, a menudo en dobles o triples chorros surgiendo de estructuras altas y puntiagudas como mástiles, vergas, pináculos y chimeneas.
El fuego de San Telmo se observa con frecuencia en los mástiles de los barcos durante las tormentas eléctricas en el mar, donde en tales circunstancias también era alterada la brújula, para mayor desasosiego de la tripulación. Benjamin Franklin observó correctamente en 1749 que es de naturaleza eléctrica. También se da en los aviones y dirigibles. En estos últimos era muy peligroso ya que muchos de ellos se cargaban con hidrógeno, gas muy inflamable, y podían incendiarse, tal como ocurrió en 1937 con el dirigible Hindenburg.
Se cuenta que el fuego de San Telmo también puede aparecer en las puntas de los cuernos del ganado durante las tormentas eléctricas y en los objetos afilados en mitad de un tornado, pero no es el mismo fenómeno que el rayo globular, aunque pueden estar relacionados.
En la Grecia antigua, la aparición de un único fuego de San Telmo se llamaba «Helena», por su sentido original de “antorcha”, y cuando eran dos se les llamaba «Cástor y Pólux» los dioscuros o hijos gemelos de Zeus, patrones de los marineros que calmaban las tormentas a petición de estos.
Citas
Cristóbal Colón se topó con el fuego de San Telmo el 26 de octubre de 1493, en el contexto del segundo viaje a América, y este hecho fue redactado por su hijo:El mismo sábado noche se vio el fuego de San Telmo, con siete velas encendidas, encima de la gavia. Con mucha lluvia y espantosos truenos. Quiero decir que se veían las luces que los marineros afirman ser el cuerpo de San Telmo, y le cantan muchas letanías y oraciones, teniendo por cierto que en las tormentas donde se aparezca nada puede peligrar.Hernando Colón, Segundo viaje de Coló n.
La Expedición de Magallanes y Juan Sebastián Elcano de la Primera Vuelta al Mundo también se topó con este fenómeno. Este fenómeno era algo conocido entre los marineros del siglo XVI y solía aparecer justo antes de la finalización de una tormenta, por lo que se creía que San Telmo protegía de este modo a los marineros. Estos hechos son recogidos en el diario de Antonio Pigafetta sobre su viaje con Hernando de Magallanes.
Se hallan referencias al fuego de San Telmo en las obras de Julio César ( De bello Africo 47), Plinio el Viejo ( Naturalis historia ii.101) y Herman Melville, así como en el diario de Antonio Pigafetta sobre su viaje con Hernando de Magallanes.— ¡Mire arriba! —dijo Starbuck de pronto—. ¡El fuego de San Telmo en lo alto del palo mayor!
En efecto, los brazos de las verjas estaban rodeados de un fuego lívido, y las triples agujas de los pararrayos lucían con tres lenguas de fuego. Los mástiles enteros parecían arder.
— ¡Fuego de San Telmo, ten piedad de nosotros! — gritó Stubb.Herman Melville, Moby Dick
Otra referencia: Silencio general. El viento calla. La naturaleza no respira. Parece muerta. A lo largo del mástil empiezan a centellear débilmente los fuegos de San Telmo; la vela cae en pesados pliegues.Julio Verne, Viaje al centro de la Tierra Las luces verdes del fuego de Santelmo rodearon cada palo, mástil y cuaderna de la nave, iluminando El holandés errante con un brillo verde fantasmagórico y sobrecogedor.Brian Jacques, “Los Náufragos de El Holandés Errante”
Charles Darwin observó el efecto mientras estaba embarcado en el Beagle una noche que estaba anclado en el Río de la Plata y describió el episodio en una carta a J. S. Henslow:Todo estaba en llamas, en el cielo había rayos y en el agua partículas luminosas (bioluminiscencia), e incluso los propios mástiles estaban coronados con una llama, los antiguos griegos interpretan el fuego de san telmo como la presencia de los semidioses.Charles Darwin, Carta a J. S. Henslow
Bola de fuego de Naga
Bolas de fuego del Naga (Tailandés: บั้งไฟพญานาค, payanak del bangfai ) es un fenómeno que ocurre en el río Mekong – situado en Tailandia (Provincias de Nong Khai e Isan) y en Laos – en el cual bolas de fuego que brillan intensamente se elevan de las profundidades. Las bolas son de color rojizo y sobre el tamaño de un huevo; se levantan un par de cientos de metros antes de desaparecer. El número de bolas de fuego es variable, se ha llegado a informar de decenas de miles por noche.
Las bolas de fuego se han visto durante siglos y se pueden observar más a menudo alrededor de la noche de Awk Wan Pansa – al final del retiro budista de las lluvias – en octubre, aunque las exhibiciones también se han divulgado en marzo, abril, mayo, junio y septiembre.
El fenómeno, que cada año atrae a millares de turistas, coincide con el final del Festival Budista de Lent en la provincia de Nong Kai cerca de la frontera con Laos en las noches de luna llena de octubre.

Bolas de fuego similares se han llegado a apreciar en contadas ocasiones en el océano Pacífico cerca de las costas de Guerrero en México, estas bolas han sido avistadas por los pueblos de las montañas cercanas a la costa y afirman que son de proporciones colosales.
Mientras los científicos buscan respuestas, muchos locales relacionan el fenómeno, que coincide con el fin del Vassa —también conocido como la cuaresma budista, en la que los monjes se retiran a sus templos durante la época del monzón— con la serpiente mitológica Naga. Algunas fuentes populares señalan que Naga lanza las bolas incandescentes para saludar a Buda en su visita a la Tierra al finalizar el Vassa, que dura unos tres meses, entre julio y octubre, en función del calendario lunar.
Causas
Los nativos creen que son producidas por el dios-serpiente Naga, algunas personas especulan que es algún tipo de fermentación en el fondo del agua y hay quien dice que son disparos o bengalas de soldados.
La hipótesis de las balas trazadoras es la más plausible, pues explica que el fenómeno se restrinja a las fechas del festival y es perfectamente compatible con el aspecto y comportamiento físico de los objetos incandescentes. Se ha filmado a soldados laosianos disparando desde el otro lado del río con balas trazadoras, y la gran distancia y el bullicio del festival impiden oír los disparos.
Fuego fatuo
Un fuego fatuo (en latín ignis fatuus ) es un fenómeno consistente en la inflamación de ciertas materias (fósforo, metano, principalmente) que se elevan de las sustancias animales o vegetales en putrefacción, y forman pequeñas llamas que se ven arder en el aire a poca distancia de la superficie del agua en lugares pantanosos y en cementerios. Son luces pálidas que pueden verse a veces de noche o al anochecer.

Teorías sobre su origen
Propuso que un fenómeno eléctrico natural (como los rayos) interaccionando con los gases de los pantanos podían ser el causante de los fuegos fatuos. 1 Esto fue apoyado por el polímata Joseph Priestley en sus series de trabajos Experiments and Observations on Different Kinds of Air (del inglés, «Experimentos y observaciones sobre diferentes clases de aire») (1772–1790); y por el físico francés Pierre Bertholon de Saint-Lazare en De l’électricité des météores (1787).
Tempranos críticos de la teoría del gas del pantano a menudo la rechazaban en varios frentes incluyendo lo improbable de la combustión espontánea, la ausencia de calor en algunos fuegos fatuos observados y sobre todo el comportamiento extraño de los fuegos fatuos que retroceden al aproximarse el observador 3 y los diferentes relatos sobre rayos bola (que también se clasifican como fuegos fatuos).
Sin embargo, la aparente retirada de los fuegos fatuos al acercarse a ellos podría explicarse simplemente por la agitación del aire por parte de los objetos cercanos que se mueven, lo que hace que los gases se dispersen. Esto se observó en los relatos muy detallados de varias interacciones cercanas con fuegos fatuos publicadas anteriormente en 1832 por el mayor Louis Blesson después de una serie de experimentos en varias localidades donde se sabía que ocurrían.
Es de destacar su primer encuentro con fuego fatuo en un pantano entre un profundo valle en el bosque de Gorbitz, Brandeburgo Oriental, Alemania. Blesson observó que el agua estaba cubierta por una película iridiscente y durante el día se podían observar burbujas que crecían abundantemente desde ciertas áreas. Por la noche, Blesson observó llamas azul-púrpura en las mismas áreas y concluyó que estaba conectado al gas ascendente. Pasó varios días investigando el fenómeno, descubriendo con desaliento que las llamas se retiraban cada vez que intentaba acercarse. Finalmente tuvo éxito y pudo confirmar que las luces fueron causadas por el gas encendido. El científico británico Charles Tomlinson en On Certain Low-Lying Meteors (1893) describe los experimentos de Blesson de la siguiente manera:Al visitar el lugar por la noche, las llamas sensibles se retiraron cuando el mayor avanzó; pero al quedarse quietos, volvieron e intentó encenderl con ellas un trozo de papel, pero la corriente de respiración producida por su aliento los mantenía a una distancia demasiado grande. Al girar la cabeza y tapar su respiración, logró encender el papel. También fue capaz de extinguir la llama al conducirla delante de él a una parte del suelo donde no se producía gas; luego, aplicando una llama al lugar de donde salía el gas, se escuchó una especie de explosión en torno a ocho o nueve pies cuadrados del pantano; se vio una luz roja, que se desvaneció en una llama azul de aproximadamente un metro de alto, y esto continuó ardiendo con un movimiento inestable. Cuando amaneció, las llamas se pusieron pálidas, y parecían acercarse más y más a la tierra, hasta que finalmente desaparecieron de la vista.
Blesson también observó diferencias en el color y el calor de las llamas en diferentes marismas. El fuego fatuo en Malapane, Alta Silesia (ahora Ozimek, Polonia) podía encenderse y apagarse, pero no podían quemar trozos de papel o virutas de madera. De manera similar, el fuego fatuo en otro bosque en Polonia cubrió trozos de papel y virutas de madera con un fluido viscoso y aceitoso en lugar de quemarlos. Blesson también creó accidentalmente fuegos fatuos en las marismas de Porta Westfalica, Alemania, mientras lanzaba fuegos artificiales.
En la ciencia moderna, generalmente se acepta que la mayoría de los fuegos fatuos son causados por la oxidación de fosfano (PH3), difosfano (P2H4) y metano (CH 4). Estos compuestos, producidos por la descomposición de compuestos orgánicos, pueden causar emisiones de fotones. Dado que las mezclas de fosfina y difosfano se encienden espontáneamente al contacto con el oxígeno en el aire, solo se necesitarían pequeñas cantidades para encender el metano mucho más abundante para crear incendios efímeros. Además, el fosfano produce pentóxido de fósforo como subproducto, que forma el ácido fosfórico al contacto con el vapor de agua. Esto podría explicar la “humedad viscosa” descrita por Blesson.
Un intento de replicar los fuegos fatuos en condiciones de laboratorio fue llevado a cabo en 1980 por el geólogo británico Alan A. Mills de la Universidad de Leicester. A pesar de que tuvo éxito en crear nubes resplandecientes y frías mediante la mezcla de fosfeno crudo y gas natural, el color de la luz era verde y producía copiosas cantidades de humo acre. Esto era contrario a la mayoría de los relatos de testigos oculares de fuegos fatuos. Como alternativa, Mills propuso en el año 2000 que los fuegos fatuos podían ser llamas frías. Estos son halos de precombustión luminiscentes que se producen cuando varios compuestos se calientan justo por debajo del punto de ignición. Las llamas frías son de hecho típicamente azuladas en color y, como su nombre sugiere, generan muy poco calor. Las llamas frías pueden ocurrir con una amplila variedad de compuestos, incluyendo hidrocarburos (incluyendo metano), alcoholes, aldehídos, aceites, ácidos, e incluso ceras. Sin embargo, no se conoce si las llamas frías pueden suceder de manera natural, pese a que muchos de los compuestos que exhiben llamas frías son productos resultado de la descomposición orgánica.
Experimentos realizados por el científico italiano Luigi Garlaschelli en 2008 reprodujeron exitosamente una luz débil y fría al mezclar fosfina con aire y nitrógeno. Aunque el brillo era todavía verdoso en su color, Garlaschelli y Boschetti hicieron notar que bajo condiciones de baja luminosidad el ojo humano no puede distinguir fácilmente entre colores. Es más, ajustando las cantidades de cases y las condiciones medioambientales (temperatura, humedad, etc.), fue posible eliminar el humo y el olor, o al menos llevarlo a niveles indetectables. Garlaschelli y Boschetti también están de acuerdo con Mills en que las llamas frías pueden ser otra explicación plausible para otros tipos de fuego fatuo.
Otros creen que organismos bioluminiscentes (por ejemplo el hongo fluorescente Armillaria mellea ) o la fosforescencia natural de las sales de calcio presentes en las osamentas provocan la luz. Otras explicaciones incluyen causas similares a las del rayo globular.
Mitos y leyendas
América
En algunas zonas rurales de Venezuela existe la leyenda de que los fuegos fatuos son los espíritus del conquistador español Lope de Aguirre y sus hombres, que no encuentran reposo en el más allá y vagan por el mundo.
En Colombia se cree que estas llamas indican el lugar de un tesoro enterrado por los nativos indígenas antes y durante la colonización española, este enterramiento es conocido como guaca. Sin embargo existe la creencia de que estas llamas solo pueden ser vistas por personas de buen corazón y sin ambiciones materiales, por ello es vista con mayor frecuencia por niños.
En Argentina y Uruguay, el fenómeno del fuego fatuo es identificado con la leyenda de la Luz mala, como manifestación de un alma en pena de alguien que no ha podido recibir sepultura cristiana o que, debido a sus pecados, no ha podido acceder al cielo.
En Costa Rica popularmente se le llama “luces de muerto”, pues se dice que cuando se ve una luz bailar entre las sombras de los caminos o cerca de cementerios, son almas de muertos, quizá de algún rico avaro, que enterró sin revelar a nadie, una botija llena de monedas.
En Luisiana (especialmente en los pantanos) se tiene la creencia de que existen unos espíritus malignos llamados fifolets. Representan fantasmas de los muertos arrastrados por las corrientes hacia los bayous.
Asia
Se cree que el Hitodama (la imagen clásica de las almas como una llama o bola de humo azul o verde) que aparece en el folclore japonés tuvo su origen en los fuegos fatuos. La bola de fuego de Naga puede ser un fenómeno similar.
Europa
Entre la población rural europea, especialmente en la cultura popular gaélica y eslava, se cree que los fuegos fatuos o “ will-o’-the-wisp ” (nombre común en el Reino Unido) son espíritus malignos de muertos u otros seres sobrenaturales que intentan desviar a los viajeros de su camino, alejándose cada vez que alguien trata de acercarse (compárese con el puck). A veces se cree que son espíritus de niños sin bautizar o nacidos muertos, que revolotean entre el cielo y el infierno. Modernas elaboraciones ocultistas los relacionan con la salamandra, un tipo de espíritu completamente independiente de los seres humanos (a diferencia de los fantasmas, que se supone que han sido humanos en algún momento anterior). También encajan en la descripción de ciertos tipos de hada, que pueden o no haber sido almas humanas.
En el folclore húngaro es conocido como lidérc y se suele crear colocando un huevo de gallina negra bajo una axila. Esta criatura protegerá y bendecirá con salud y riqueza a su dueño y creador. Igualmente, el fuego fatuo aparece en numerosas leyendas populares de las Islas británicas, siendo a menudo en ellas un personaje malicioso. En su libro British Goblins , William Wirt Sikes menciona una leyenda galesa sobre un fuego fatuo ( pwca en galés) en la que un campesino que vuelve a casa al anochecer avista una luz brillante moviéndose bastante por delante de él. Desde más cerca, logra ver que la luz es una linterna portada por una «pequeña figura oscura» a la que sigue durante varias millas. De repente se halla en el borde de una enorme cima con un rugiente torrente de agua corriendo bajo él. En este preciso momento el portador de la linterna salta cruzando el agujero, elevando la luz muy por encima de su cabeza y lanzando una risa maliciosa, tras lo cual apaga la luz dejando al pobre campesino lejos de su casa, sumido en la oscuridad al borde del precipicio. Ésta es una historia cautelar bastante común sobre el fenómeno, si bien los fuegos fatuos no siempre se consideran peligrosos; hay algunas leyendas que los hacen guardianes de tesoros, de forma muy parecida a como el leprechaun irlandés guiaba a los que tenían la valentía de seguirlo hasta riquezas seguras. Otras historias tratan sobre viajeros que se pierden en el bosque, se encuentran con un fuego fatuo y dependiendo de cómo le tratan éste los pierden aún más en él o le guían fuera.
Katherine Briggs menciona a Will el Herrero de Shropshire en su Diccionario de las hadas . En este caso Will es un herrero malvado a quien San Pedro le da una segunda oportunidad en las puertas del Cielo, pero que lleva tan mala vida que termina siendo condenado a vagar por la Tierra. El diablo le provee de un único carbón ardiente con el que calentarse, que entonces él usa para atraer a los viajeros imprudentes a los pantanos.
Oceanía
El equivalente australiano, conocido como la luz Min Min ha sido supuestamente visto en partes del interior después del anochecer. La mayoría de avistamientos han sido informados que habrían ocurrido en la región de Channel Country (la mayor parte de dicha región se encuentra en Queensland).
Las historias sobre las luces se pueden encontrar en el mito aborigen anterior a la colonización occidental de la región y desde entonces se han convertido en parte de la historia del folclore australiano. Los aborígenes australianos sostienen que el número de avistamientos ha aumentado junto con la creciente entrada de europeos en la región. De acuerdo con el folclore, las luces algunas veces siguen o se aproximan a la gente y desaparecían cuando eran disparadas, sólo para aparecer después.
Literatura
En la literatura, el fuego fatuo tiene a menudo un significado metafórico, describiendo cualquier esperanza o meta que guía a alguien pero que es imposible de alcanzar, o algo que uno encuentra siniestro y desconcertante.
Algunos ejemplos de referencias en la literatura son:
- En el cuento esotérico de Johann Wolfgang von Goethe La serpiente verde y la bella azucena : «Al salir delante de la puerta vio dos grandes fuegos fatuos flotando encima del bote amarrado y le aseguraron que se hallaban en los más grandes apuros y que estaban deseosos de verse ya en la otra orilla…».
Asimismo se le menciona en la obra teatral Fausto, del mismo autor (Johann Wolfgang von Goethe), donde es mencionado el fuego fatuo por Mefistofeles, e incluso aparece un fuego fatuo y fuegos fatuos como personajes que sostienen diálogos con Mefistofeles y el Doctor Fausto.
- El poema de Samuel Taylor Coleridge «Balada del viejo marinero» describe el fuego fatuo. Dicho poema fue publicado por primera vez en las Baladas líricas , en 1798.
Alrededor, alrededor, por un lado y por el otro. Los fuegos-de-la-muerte bailaban a la noche;
El agua, como óleos de una bruja Ardía verde, y azul, y blanco.
Aurora polar
Aurora polar (o aurora polaris ) es un fenómeno en forma de brillo o luminiscencia que se presenta en el cielo nocturno, generalmente en zonas polares, aunque puede aparecer en otras zonas del mundo durante breves períodos. En el hemisferio sur es conocida como aurora austral y en el hemisferio norte como aurora boreal (de Aurora, la diosa romana del amanecer, la palabra latina Auster , que significa sur, y la palabra griega Bóreas , que significa norte).

Origen
Una aurora se produce cuando una eyección de partículas solares cargadas choca con la magnetósfera de la Tierra. Esta «esfera» que nos rodea obedece al campo magnético generado por el núcleo de la Tierra, formada por líneas invisibles que parten de los dos polos, como un imán. Además existen fenómenos muy energéticos, como las fulguraciones o las eyecciones de masa coronal que incrementan la intensidad del viento solar. Cuando dicha masa solar choca con nuestra esfera protectora, estas radiaciones solares, también conocidas con el nombre de viento solar, se desplazan a lo largo de dicha esfera. En el hemisferio que se encuentra en la etapa nocturna de la Tierra en los polos, donde están las otras líneas de campo magnético, se va almacenando dicha energía hasta que no se puede almacenar más, y esta energía almacenada se dispara en forma de radiaciones electromagnéticas sobre la ionosfera terrestre, creadora, principalmente, de dichos efectos visuales. Magnetosfera de la Tierra desviando las partículas solares cargadas (líneas amarillas) hacia lo polos, donde forman las auroras.
El Sol, situado a 150 millones de kilómetros de la Tierra, emite continuamente un flujo de partículas denominado viento solar. La superficie del Sol o fotosfera se encuentra a unos 5800 °C; sin embargo, cuando se asciende en la atmósfera del Sol hacia capas superiores la temperatura aumenta en vez de disminuir. La temperatura de la corona solar, la zona más externa que se puede apreciar a simple vista solo durante los eclipses totales de Sol, alcanza temperaturas de hasta tres millones de grados. Al ser mayor la presión en la superficie del Sol que la del espacio que le rodea, las partículas cargadas que se encuentran en la atmósfera del Sol tienden a escapar y son aceleradas y canalizadas por el campo magnético del Sol, alcanzando la órbita de otros cuerpos de gran tamaño como la Tierra. Además existen fenómenos muy energéticos, como las fulguraciones o las eyecciones de masa coronal que incrementan la intensidad del viento solar.
Las partículas del viento solar viajan a velocidades en un rango aproximado de 490 a 1000 km/s, de modo que recorren la distancia entre el Sol y la Tierra en aproximadamente dos días. En las proximidades de la Tierra, el viento solar es deflectado por el campo magnético de la Tierra o magnetósfera. Las partículas fluyen en la magnetosfera de la misma forma que lo hace un río alrededor de una piedra o de un pilar de un puente. El viento solar también empuja a la magnetósfera y la deforma de modo que, en lugar de un haz uniforme de líneas de campo magnético como las que mostraría un imán imaginario colocado en dirección norte-sur en el interior de la Tierra, lo que se tiene es una estructura alargada con forma de cometa con una larga cola en la dirección opuesta al Sol. Las partículas cargadas tienen la propiedad de quedar atrapadas y viajar a lo largo de las líneas de campo magnético, de modo que seguirán la trayectoria que le marquen estas. Las partículas atrapadas en la magnetosfera colisionan con los átomos y moléculas de la atmósfera de la Tierra que se encuentran en su nivel más bajo de energía, en el denominado nivel fundamental. El aporte de energía proporcionado a estas provoca estados de alta energía también denominados de excitación. En poco tiempo, del orden de las millonésimas de segundo, o incluso menos, los átomos y moléculas vuelven al nivel fundamental perdiendo esa energía en una longitud de onda en el espectro visible al ser humano, lo que vulgarmente viene a ser la luz en sus diferentes colores. Las auroras se mantienen por encima de los 95 km respecto a la superficie terrestre porque a esa altitud la atmósfera ya es suficientemente densa como para que los choques con las partículas cargadas ocurran con tanta frecuencia que los átomos y moléculas estén prácticamente en reposo. Por otro lado, las auroras no pueden estar más arriba de los 500-1000 km porque a esa altura la atmósfera es demasiado tenue —poco densa— como para que las pocas colisiones que ocurren tengan un efecto significativo en su aspecto lumínico.
Los colores y las formas de las auroras
Las auroras tienen formas, estructuras y colores muy diversos que además cambian rápidamente con el tiempo. Durante una noche, la aurora puede comenzar como un arco aislado muy alargado que se va extendiendo en el horizonte, generalmente en dirección este-oeste. Cerca de la medianoche el arco puede comenzar a incrementar su brillo, pueden formarse ondas o rizos a lo largo del arco y también estructuras verticales que se parecen a rayos de luz muy alargados y delgados. De repente la totalidad del cielo puede llenarse de bandas, espirales, y rayos de luz que tiemblan y se mueven rápidamente por el horizonte. Su actividad puede durar desde unos pocos minutos hasta horas. Cuando se aproxima el alba todo el proceso parece calmarse y tan solo algunas pequeñas zonas del cielo aparecen brillantes hasta que llega la mañana. Aunque lo descrito es una noche típica de auroras, nos podemos encontrar múltiples variaciones sobre el mismo tema.
Los colores que vemos en las auroras dependen de la especie atómica o molecular que las partículas del viento solar excitan y del nivel de energía que esos átomos o moléculas alcanzan. Por ejemplo no es lo mismo que la excitación se produzca en una zona con una atmósfera con niveles muy altos de oxígeno que en otra con niveles muy bajos de este gas.
El oxígeno es responsable de los dos colores primarios de las auroras. El verde/amarillo se produce a una longitud de onda energética de 557,7 nm, mientras que el color más rojo y morado lo produce una longitud menos frecuente en estos fenómenos, a 630,0 nm. Para entender mejor estar relación se recomienda buscar información sobre el espectro electromagnético en especial el rango visible.
El nitrógeno, al que una colisión le puede desligar alguno de sus electrones de su capa más externa, produce una luz azulada, mientras que las moléculas de nitrógeno son muy a menudo responsables de la coloración rojo/púrpura de los bordes más bajos de las auroras y de las partes más externas curvadas.
El proceso es similar al que ocurre en los tubos de neón de los anuncios o en los tubos de televisión. En un tubo de neón, el gas se excita por corrientes eléctricas y al perder su energía en forma de luz se forma la típica luz rosa que todos conocemos. En una pantalla de televisión un haz de electrones controlado por campos eléctricos y magnéticos incide sobre la misma, haciéndola brillar en diferentes colores dependiendo del revestimiento químico de los productos fosforescentes contenidos en el interior de la pantalla.
Ciencia y mitología
Las auroras boreales se observaron y probablemente impresionaron mucho a los antiguos. Tanto en Occidente como en China, las auroras fueron vistas como serpientes o dragones en el cielo.
Las auroras boreales han sido estudiadas científicamente a partir del siglo XVII. En 1621, el astrónomo francés Pierre Gassendi describe este fenómeno observado en el sur de Francia y le da el nombre de aurora polar. En el siglo XVIII, el astrónomo británico Edmond Halley sospecha que el campo magnético de la Tierra desempeña un papel en la formación de la aurora boreal.
Henry Cavendish, en 1768, logra evaluar la altitud en la que se produce el fenómeno, pero no fue hasta 1896 cuando reproduce en el laboratorio de Krist ian Birkeland con los movimientos de las partículas cargadas en un campo magnético, facilitando la comprensión del mecanismo de formación de auroras.
Espejismo
Un espejismo es una ilusión óptica en la que los objetos lejanos aparecen reflejados en una superficie lisa como si se estuviera contemplando una superficie líquida que, en realidad, no existe.
Mecanismo
En los desiertos tropicales, el aire en contacto con el suelo tórrido se calienta y su densidad varía de tal manera que, contrario a lo usual, el aire más frío se mantiene encima del más caliente, el cual es calentado por la radiación reflejada por el suelo. Esto crea una densidad desigual en el aire que le otorga varios índices de refracción. Por lo tanto, un rayo de luz reflejado por un objeto lejano que va hacia abajo, y en la dirección del observador, va experimentando refracciones sucesivas al atravesar las distintas capas de aire; su inclinación hacia el suelo es cada vez menor y, tras llegar a la horizontal, el rayo sufre nuevas refracciones, aunque esta vez hacia arriba. Así es como, tras haber descrito una trayectoria curva de convexidad dirigida hacia abajo, llega al ojo del observador, que ve en el suelo ( espejismo inferior ) una imagen poco neta del objeto. Ahora bien, como otros rayos de procedencia real llegan también directamente al ojo del observador, este tiene la impresión de ver a la vez el objeto (por ejemplo, una palmera en un desierto) y, al pie del mismo, una segunda imagen invertida, como si esta palmera se reflejara en una superficie líquida inexistente. Por tanto, en las horas más calurosas del verano, la imagen del cielo parece venir del asfalto de la carretera caliente, a la vez que esta parece mojada o encharcada para el observador.
Es excepcional que la trayectoria de los rayos luminosos sea convexa hacia arriba ( espejismo superior ); de producirse, un barco, una montaña, etc., parecen flotar en la atmósfera.

Las Glorias
Efecto Óptico
Como se crea un espejismo?
Excepciones extraordinarias
Las exhibiciones de halo de hielo
Van desde el círculo familiar alrededor del sol o la luna hasta eventos raros y preciados cuando todo el cielo está tejido por arcos intrincados. Pequeños cristales de hielo en la atmósfera crean halos al refractar y reflejar la luz. Los halos otorgan una delicada belleza a los cielos y nos hablan de los cristales que habitan las nubes. Descubra cómo se forman los halos, cuándo y dónde verlos en el cielo.

Los Sundogs
A veces llamados Sun Dogs, Parhelia o Mock Suns, tienen el halo de 22º , el más frecuente de los halos de hielo. Se ven más fácilmente cuando el sol está bajo. Mire unos 22 ° ( mano extendidacon el brazo extendido) a su izquierda y derecha y a la misma altura. Cuando el sol está más alto están más lejos. Cada ‘perro’ es de color rojo hacia el sol y, a veces, tiene verdes y azules más allá. Los perros pueden ser cegadoramente brillantes, en otras ocasiones son una mera mancha de color en el cielo. Son visibles en todo el mundo y en cualquier época del año, independientemente de la temperatura a nivel del suelo. En Europa y América del Norte se verá uno en promedio dos veces por semana si se busca.

Rayos Crepusculares
Los Rayos del Sol tambien llamados Rayos Crepusculares, que fluyen a travez de los espacios de las nubes son columnas paralelas de aire iluminado por el sol, separadas por regiones sombreadas por nubes mas oscuras.
Los rayos parecen diverger debido a los efectos de la perspectiva, como los surcos paralelos de los campos recien arados o un camino ancho a sus pies que aparentemente se estrechan con la distancia.

Rayos anti-solares (anti-crepusculares)
Los rayos crepusculares parecen converger sobre el sol, los rayos anticrepusculares o antisolares convergen en la dirección opuesta y debes estar de espaldas al sol o al atardecer para verlos. Parecen converger hacia el punto antisolar , el punto de la esfera celeste directamente opuesto al sol. Al igual que los rayos crepusculares, son haces de luz solar paralelos que salen de los agujeros en las nubes y sus direcciones aparentemente extrañas son un efecto de perspectiva. Piense en un camino largo y recto, converge hacia el horizonte pero da la vuelta y también converge hacia el horizonte opuesto.
Los rayos crepusculares y anticrepusculares se comportan de la misma manera. Los rayos anticrepusculares no son raros pero deben buscarse con cuidado. Cuando los rayos crepusculares ordinarios sean visibles, dé la vuelta y busque sus números opuestos. Más raramente, los rayos del sol atraviesan el cielo .

Sombras de nubes
Una nube distante proyecta su sombra sobre el cielo. Las sombras de las nubes, en efecto contrario de los rayos crepusculares pueden producir algunos efectos dramáticos.

Efectos Atmosféricos
Fuego de San Telmo
Eclipse Sun Dog