XXIII.
Dichos, Proverbios, Adagios, Adivinanzas y Refranes Marineros


Dedicado esta sección a los "Refranes Marineros",  a esa sabiduría popular, recogida en forma de frases, que es una parte de nuestro patrimonio naval intangible. Precisamente por su aparente inmaterialidad, a este conocimiento heredado desde hace tiempo de ancestros comunes, no se la ha otorgado suficiente valor. Sin embargo, forma parte de nuestro modelo de vida, nos permite reconocernos en cualquier parte del mundo y, lo mas importante, refleja una identidad común en la que se pueden ver reflejados muchos pueblos y naciones costeras.

Si bien la tecnología naval va cambiando, el mar permanece, y su conocimiento proporciona mucha sabiduría, porque quien es capaz de sobrevivir en una tormenta aprende mucho del medio, pero también de sí mismo.

Hay frases que con pocas palabras dicen mucho mas de lo que parece. Las que vinculan el mar con la vida son de esas. Muchas reflejan conocimiento no sólo del medio marítimo, sino del mundo. Hay en ellas verdades que harían temblar al mas estable de todos los edificios.

"No hay nada más liberador y estimulante que vivir la vida en las olas del mar. Algunas de las mayores expediciones de navegación desplegaron los bordes del mundo gracias a los marineros".

Las frases de marineros que todo verdadero marinero debería saber y todos podemos beneficiarnos de la sabiduría de nuestros predecesores y de grandes marineros, para relacionarla con nuestras vidas para nuestro éxito.

Refrán

El refrán es una  paremia  tradicional de origen y uso popular –y por definición, de autoría anónima– con intención didáctica, moral o incluso filosófica.  En algunos contextos puede encontrarse como sinónimo de  dicho  e incluso de  proverbio , si bien el dicho, esencialmente  oral abarca un significado más amplio, como conjunto de palabras que proponen un concepto cabal, agudo, oportuno, e incluso malicioso, o bien una ocurrencia chistosa. Por su parte, el proverbio, como el  adagio  y la máxima, suelen estar asociados a lo culto, lo bíblico o lo oriental. En suma, en el ámbito de la lengua castellana o idioma español, el refrán es, por antonomasia, la paremia más representativa de la sabiduría popular.

Uso y contenido

En el uso de la lengua española, el término refrán (del francés refrain, sentencia corta) ha conocido una gran difusión hasta el punto de desplazar a proverbio, idea que se asocia a una  paremia  culta como los proverbios bíblicos u orientales. Así, el refrán, paremia popular o popularizada, aparece en obras de autores clásicos como  Gonzalo de Berceo , el  Arcipreste de Hita Don Juan Manuel Alfonso X el Sabio  o el propio  Miguel de Cervantes , que en  el Quijote  asegura por boca de  Quijano  que "los refranes son sentencias breves, sacadas de la experiencia y especulación de nuestros antiguos ancianos", y hablando con  Sancho Panza  le dice que "cualquiera de los que has dicho basta para dar a entender tu pensamiento" (Segunda parte, capítulo XVII); o cuando le hace decir al cautivo que "el refrán es sentencia breve sacada de la luenga y discreta experiencia".

Sentencias breves y anónimas que según Maldonado, «señalan qué actitud conviene adoptar en cada situación, definen la razón de una determinada conducta, o extraen las consecuencias de una circunstancia, entrañando en cualquier caso un fin didáctico y aleccionador y convirtiendo la anécdota humana en tema de reflexión». 6 No obstante, muchas frases literarias y bíblicas han pasado a formar parte del  refranero popular . La mayoría de los refranes son observaciones acuñadas por la experiencia colectiva a lo largo del tiempo, con temas que van desde la meteorología hasta el destino invariable y fatalista de existencia. Constituyen el bagaje cultural del pueblo en tiempos en los que la  tradición oral  pasaba la sabiduría popular de una generación a otra.

Su estructura suele ser  pareada  y recurren tanto a la  prosa  y verso como a figuras literarias ( antítesis elipsis  o  paralelismo ) para facilitar su perpetuación oral.


Origen del término

 La etimología de refrán delata su origen en el contexto de la lírica provenzal, como parte de la letra de canciones y poemas, cantados o recitados. Así lo describen ya en el Medioevo los términos «refrain» (francés) y refranh (provenzal) como «parte del poema que se repite en cada estrofa (en piezas de desarrollo popular como los «rondeau, virelai, ballade, chant royal», etc.). Estando sin embargo ausente en las formas más cortesanas (como el «grand chant courtois»). Cuando el refrain «cambia en cada estrofa», puede relacionarse con estructuras líricas más primitivas como por ejemplo la jarcha mozárabe». En el uso actual de la lengua española ha quedado redefinido con la palabra ‘estribillo’.


Ediciones de refraneros

La primera colección conocida de refranes se atribuye a don Íñigo López de Mendoza, marqués de Santillana, bajo el título de Refranes que dizen las viejas tras el fuego. El racionero de la Catedral de Toledo Blasco de Garay escribió después dos Cartas en refranes (Toledo, 1541) que carecen del propósito exhaustivo de una compilación pero pretenden ser un agradable pasatiempo cortesano. La primera era exclusivamente de refranes y la segunda de sentencias, pero en posteriores ediciones se añadieron otras dos anónimas, una de Juan Vázquez de Ayora y otra, sumamente deturpada, que provenía de un impreso sevillano. Así aparecieron junto al Processo de cartas de amores de Juan de Segura y el Diálogo de mujeres de Cristóbal de Castillejo, recortado y moralizado, por cierto, por Blasco de Garay.

Pedro de Vallés imprimió la tercera colección, Libro de refranes copilados por el orden del A. B. C... en el que se contienen Quatro mil y trezientos refranes. El más copioso que hasta oy ha salido impresso (Zaragoza: Juana Millán, viuda de Diego Hernández, a costa de Miguel Çapilla, 1549), que es la primera importante cuantitativamente hablando. Después vinieron tres cuyo carácter era profundamente humanístico. La cuarta fue realizada por Hernán Núñez, catedrático de Salamanca, titulada Refranes o proverbios en romance (Salamanca, Juan de Canova, 1555), con un prólogo de León de Castro. El sevillano Juan de Mal Lara, discípulo de ambos, publicó otra, La Philosophia vulgar, Sevilla, Hernando Díaz, 1568. Por otra parte, Sebastián de Horozco, quien también estudió en Salamanca, escribió una Recopilación de refranes y adagios, que consta de 8.311 ordenados alfabéticamente, pero cuyo manuscrito ha perdurado incompleto, falto de aquellos que debían reunirse en las letras A, B, C y D. Lo que queda fue impreso en 1916 con el título de Teatro universal de los proverbios. Por último, Gonzalo Correas reunió en un largo manuscrito que tituló Vocabulario de refranes y frases proverbiales que no llegó a ser impreso hasta siglos más tarde, e incorpora casi por completo la obra de Vallés.  Ya en el siglo XVII publicaron otros refraneros eruditos como Juan Sorapán de Rieros y Jerónimo Martín Caro y Cejudo, entre otros.

De entre la larga lista de recopilaciones posteriores, pueden mencionarse, por ejemplo –y a título orientativo– las de Luis Martínez Kleiser (Refranero general ideológico español de 1953), el Refranero agrícola español de Nieves de Hoyos o el Diccionario de refranes comentado de Regino Etxabe, de 2012.

1. “¿Por qué amamos el mar? Es porque tiene un poder potente para hacernos pensar cosas que nos gusta pensar”. Robert Henri.

2. “El arte del marinero es no dejar nada al azar”. Annie Van De Wiele:

3. “Ningún pesimista descubrió los secretos de las estrellas, navegó a una tierra desconocida o abrió un nuevo cielo al espíritu humano”. Helen Keller.

4. “Desear nada más allá de lo que tienes es seguramente felicidad. A bordo de un barco, con frecuencia es posible lograr exactamente eso. Es por eso que navegar es una forma de vida, una de las mejores vidas”. Carleton Mitchell.

5. “¡Hazte cargo de tu vida! Las mareas no dirigen al barco. El marinero sí”. Ogwo David Emenike.

6. “No tengo miedo a las tormentas, porque estoy aprendiendo a navegar mi barco”. Louisa May Alcott.

7. “Los marineros, con su sentido incorporado de orden, servicio y disciplina, realmente deberían estar gobernando el mundo”. Nicholas Monsarrat. ¿Sabes lo difícil que es la disciplina?

8. “El que ama la práctica sin la teoría es como el marinero que aborda el barco sin timón y brújula”. Leonardo da Vinci:

9. “En el mar, aprendí lo poco que una persona necesita para ser feliz”. Robin Lee Graham.

10. “Sin objetivos y planes para alcanzarlos, eres como un barco que zarpó sin destino”. Fitzhugh Dodson.

11. “El buen marino soporta la tormenta que no puede evitar y evita la tormenta que no puede capear”. Anónimo.

12. “Un hombre sin una meta es como un barco sin timón”. Thomas Carlyle. ¿Sabes como alcanzar tus metas?

13. “Un barco en el puerto es seguro, pero para eso no están hechos los barcos”. Grace Hopper.

14. “Si uno no sabe a qué puerto está navegando, no hay viento que sea favorable”. Séneca.

15. “El pesimista se queja del viento; el optimista espera que cambie; el realista ajusta las velas”. William Arthur Ward.

16. “No puedo cambiar la dirección del viento, pero puedo ajustar mis velas para llegar siempre a mi destino”. Jimmy Dean.

17. “Ese lenguaje es de marinero, pero tú no eres marinero, Si tengo el lenguaje, es como si lo fuese”. José Saramago.

18. “El viento y las olas siempre están del lado del navegante más hábil”. Edmund Gibbon.

19. “¡Vuelve a dar la vuelta al mundo y a casa, así son los marineros!”. William Allingham.

20. “La cura para cualquier cosa es el agua salada: sudor, lágrimas o el mar”. Isak Dinesen.

21. “No es tanto el barco como la hábil navegación lo que asegura el viaje próspero”. George William Curtis.

22. “Escucha, ahora escucha a los marineros llorar. Huele el mar y siente el cielo. Deja que tu alma y tu espíritu vuelen hacia el místico”. Van Morrison.

23. “Para tener éxito en el mar debemos mantener las cosas simples”. Pete Culler.

24. “Las alegrías de un marinero son tan simples como las de un niño”. Bernard Moitessier.

25. “¿Para qué quieres ser marinero? Hay mayores tormentas en política que las que jamás encontrarás en el mar. Piratería, costados, sangre en las cubiertas. Los encontrarás a todos en política”. David Lloyd George.

26. “Si no puedes repararlo, tal vez no debería estar a bordo”. Lin y Larry Pardey.

27. «Hay tres clases de individuos: los que viven, los que mueren, y los que estan en la mar». Anónimo.

28. “Dile eso a los marines que los marineros no lo creerán”. Walter Scott.

29. “Debo volver a bajar al mar, al mar solitario y al cielo. Y todo lo que pido es un barco alto y una estrella para guiarme”. John Masefield.

30. “El arte es un océano y yo soy un marinero soñado”. Biju Karakkonam

31. “Lo único bueno de nuestra escuela eran los cadetes; Elegí estar en la Marina, puramente por el atuendo de marinero”. David Walliams

32. “Y nunca rompa el corazón de un marinero, podría irse y navegar toda su vida solo, todos los días, todas las noches con el corazón roto y sin brújula”. Neymat Khan.

33. “El que no navegue hasta que se hayan superado todos los peligros nunca debe navegar”. Thomas Fuller.

34. “El Mary Celeste navegará en el sueño de muchos marineros en busca de las almas que tripularán sus cubiertas de madera”. Anthony T. Hincks.

35. “Una mujer conoce la cara del hombre que ama, como un marinero conoce el mar abierto”. Honore de Balzac.

36. “Fuera de la vista de la tierra, el marinero se siente seguro. Es la playa lo que le preocupa”. Charles Davis.

37. “¡Ella es la sirena que me cautiva al marinero con todos sus encantos!”. Avijeet Das.

38. “Todos nosotros tenemos en nuestras venas exactamente el mismo porcentaje de sal en la sangre que existe en el océano, y, por lo tanto, tenemos sal en nuestro sudor, y en nuestras lágrimas. Estamos atados al océano. Y cuando volvemos al mar, ya sea para navegar o mirarlo, volvemos de donde venimos”. John F. Kennedy.

39. “¡Oh, marinero, recoge todas tus piedras como derrotas debajo de tus honorarios y tíralas al mar!”. Avijeet Das.

40. “El hombre que tiene una niña en cada puerto no es marinero sino mayorista”. Evan Esar.

41. “Solo hay un tablón entre un marinero y la eternidad”. Thomas Gibbons.

42. “Qué feliz es la vida del marinero, de costa a costa para vagar; En cada puerto encuentra una esposa, en cada tierra un hogar”. Isaac Bickerstaffe.

43. “Los marineros tienen los cuerpos más limpios y las mentes más sucias”. Eleanor Roosevelt.

44. “Estamos encarcelados en el reino de la vida, como un marinero en su pequeño bote, en un océano infinito”. Anna Freud.

45. “Un marinero no se define tanto por cuántos mares ha navegado sino como por cuántas tormentas ha superado”. Matshona Dhliwayo.

46. “Un verdadero marinero es aquel que encuentra el amor en cada puerto”. Tapan Ghosh.

47. “Yo juro como un marinero”. Anya Taylor-Joy.

48. “Mi padre era marinero y nuestras vacaciones de verano siempre eran en un velero. Tenía un pequeño bote antes de tener un ciclomotor”. Ernesto Bertarelli.

49. “Papá era un marinero apasionado y me enseñó”. Dorothy Atkinson.

50. “Siempre me ha resultado difícil esperar las cosas, ya sea para ver a mi padre o mi hermano marinero Alan, nuevamente después de sus largos viajes por mar”. Anna Neagle.

51. “Para un bombero, el viento es una maldición. Para un marinero, el viento es una bendición”. Mokokoma Mokhonoana.

52. “Yo amo cocinar. Soy marinera, Y era la campeona de ping-pong de octavo grado”. Vicki Lawrence.

53. “Tengo varios planes B: quiero ser marinera; Me gusta dibujar; Me encantaría aprender muchas cosas, pero no tengo tiempo”. Audrey Tautou.

54. “Las tormentas más fuertes son los mejores marineros. Los juegos más fuertes son los mejores jugadores. Los desafíos más difíciles hacen a los mejores líderes”. Israelmore Ayivor.

55. “Hay algunas cosas que aprendes mejor en calma y otras en tormenta”. Willa Cather.

56. “Los días pasan felices conmigo donde sea que navegue mi barco”. Joshua Slocum.

57. “Un marinero elige el viento que lleva el barco desde un puerto seguro. Ah, sí, pero una vez que estás en el extranjero, como has visto, los vientos tienen una mente propia. Ten cuidado, Charlotte, ten cuidado con el viento que elijas”. Avi.

58. “Nunca puedes cruzar el océano a menos que tengas el coraje de perder de vista la costa”. Cristóbal Colón.

59. “Siguiendo la luz del sol, abandonamos el Viejo Mundo”. Cristobal Colón.

60. “Los mares tranquilos nunca fueron buenos maestros para marineros”. Franklin D. Roosevelt.

61. “Y después de dos días en la civilización nos dimos cuenta de que nunca podríamos quedarnos por mucho tiempo y comenzamos a planear nuestra próxima aventura”. Bob Bitchin.

62. “Se desató una terrible tempestad y, entonces, empecé a vislumbrar el terror y el asombro en los rostros de los marineros”. Daniel Defoe, Robinson Crusoe.

63. “Cuando os hicisteis a la mar, vosotros, los marineros comunes, ¿Suponíais que los treinta y nueve iban a sobrevivir?” James Michener, Caribe.

64. “Nada coincide con el beso de un marinero que vuelve a casa donde pertenece”. Sameh Elsayed.

65. “ Pilato escuchó a la multitud. ¿Qué marinero escucha el oleaje?” Charles de Leusse.

66. “El mar nunca ha sido amigable con el hombre. A lo sumo ha sido cómplice de la inquietud humana”. Joseph Conrad.

67. “Cualquiera puede sostener el timón cuando el mar está en calma”. Syrus Publilius.

68. “Te dirán, marineros, cuando estén lejos, en cada puerto que encuentre una amante”. John Gay.

69. “Dentro de veinte años estarás más decepcionado por las cosas que no hiciste que por las que hiciste. Así que suelta las amarras. Navega lejos del puerto seguro. Atrapa los vientos alisios en tus velas. ¡Explora! ¡Sueña! ¡Descubre!” Mark Twain.

70. “Si deseas construir un barco, no toques a los hombres para recoger madera, dividir el trabajo y dar órdenes. En cambio, enséñales a anhelar el vasto e interminable mar”. Antoine de Saint-Exupéry.

 
 

Refranes Marineros

 
 

Las 10 mejores frases sobre el mar

Análisis. 

En las frases sobre los marineros se mencionan principios claves para el éxito personal que tu también puedes aplicar en tu vida diaria, como son:

  • Usar el mar para visualizar . El mar posee un poder para llevar la calma y los buenos pensamientos a nuestro cerebro que debemos aprovechar.
  • Establecer en nuestras vidas metas y planes para alcanzarlas. Debemos siempre tener nuestras metas y planes bajo la manga, de esta manera sabremos a dónde nos estamos dirigiendo en este mar de la vida.
  • Usar el mar para curar . Ya sea en salud humana o si tienes una avería en tu vehículo la cual no consigues reparar, el mar es mágico para restablecer o guiar las recuperaciones.
  • Las tormentas son las que te hacen buen marinero en tu vida . Son las adversidades de la vida las que te dan la experiencia.

Si quieres acceder al potencial de tu mente, visita textos que expandan tu mente para que veas los diferentes programas que te pueden ayudar a eliminar creencias limitantes, cambiar hábitos y/o reprogramar tu subconsciente.

Mientras escuchas el sonido imaginario de la mar, te invito a leer algunas máximas o refranes sobre los navegantes, el tiempo, la mar que me han parecido interesantes.

No estaremos de acuerdo con todas ellas, pero la mayoría de estas sentencias encajan porque tienen la experiencias de profesionales con cierta carga de fondo, salvo algún toque machista, aunque reconozcamos que a las mujeres, generalmente no les gusta demasiado navegar ni la pesca, (salvo honrosas excepciones, claro). En todo caso podría valerte alguna de ellas, por lo menos.

  • A barco desesperado, Dios le encuentra puerto.
  • A barco nuevo, capitán viejo.
  • Abogacía: que uno boga y otro cía.
  • A bordo no hay más cuerda que la del reloj.
  • A buen viento, mucha vela pero poca tela.
  • A clavo ardiendo, se agarra el que se está hundiendo.
  • A golpe de mar, pecho sereno.
  • A la mar me voy, mis hechos dirán quién soy.
  • A norte joven y a sur viejo, no les fíes el pellejo.
  • Agua a la entrada de la luna, o mucha o ninguna.
  • Alba roja, vela moja.
  • Al hogar, como a la nave, le conviene el mar suave.
  • Amarga más pelo de mujer que calabrote de navío.
  • A mucho viento, poca vela.
  • A navegar el marino y a sembrar el campesino.
  • A piloto diestro, no hay mar siniestro.
  • Aprovecha la racha, que viene escasa.
  • A tal patrón, tal marinero.
  • Aunque la mar sea honda, echa la sonda.
  • A velas partidas, sálvenos Dios y Santa María.
  • Barco a la capa, marinero a la hamaca.
  • Cada palo que aguante su vela.
  • Carga la nao trasera si quieres que ande a la vela.
  • Cielo rasgado, viento o mar picado.
  • Cielo rojo al amanecer, el mar se ha de mover.
  • Con ballestrinque y cote, no se zafa ningún bote.
  • Con más mar, más vela.
  • Con la Mujer y con la mar hay que saber navegar.
  • Con viento de popa y poco andar, el barco se ha de atravesar.
  • Cuando agua venga antes que viento, prepara aparejo a tiempo.
  • Cuando al marinero le dan de beber, o esta jodido o lo van a joder.
  • Cuando la vela azota el palo, malo.
  • Cuando sopla norte oscuro, quédate al abrigo de cabo seguro.
  • Delfines que mucho saltan, viento traen, y calma espantan.
  • De la carta al timón, al revés la corrección.
  • De navegar apercibido, nadie se ha arrepentido.
  • De remeros novatos, boga ranchera.
  • Deberás amarrar pensando que has de desamarrar.
  • Deberás fondear pensando que has de levar.
  • Después de perdido el barco, todos pilotos.
  • Donde hay patrón, no manda marinero.
  • Ea, ea, que el que no embarca no se marea.
  • El capitán verdadero, embarca el primero y desembarca el postrero.
  • El joven para aferrar, y el viejo para el compás.
  • El muerto es del mar cuando la tierra lejos está.
  • El que veló, sondó y desconfió, jamás se perdió.
  • El viejo que tiene mujer moza, ojo al timón y mano a la escota.
  • En buen tiempo, no faltan pilotos.
  • En cada costera, mucho se espera.
  • En calma de mar no creas, por sereno que lo veas.
  • En el acto de varar, manda la máquina parar.
  • En lo que claramente veo, no brujuleo.
  • En mar y amores, entrarás cuando quieras y saldrás cuando puedas.
  • En noche cerrada, más vale vela aferrada.
  • En poca agua, poco se navega.
  • Espera que llene la mar para entrar en la canal.
  • Fuego fatuo y Sur soplando, va el tiempo empeorando.
  • Gaviota a tierra volando, marinero velas rizando.
  • Gaviotas en tierra anuncian temporal fuera.
  • Gaviota que busca madriguera, anuncia tempestad de esta manera.
  • Horizonte claro con cielo nublado, buen tiempo declarado.
  • La mar y la mujer de lejos se han de ver.
  • Lancha sin cubierta, sepultura abierta.
  • Las estrellas a brillar, marinero a la mar.
  • La vela hay que velarla, y si no guardarla.
  • Lo que sea de la mar, todo es azar.
  • Luna con cerca y agua en cubierta, marinero alerta.
  • Mal hijo y buen marinero, mueren lejos.
  • Mar rizada contra ola, al contraste el viento rola.
  • Marzo ventoso, para el campesino provechoso y para el marino desastroso.
  • Más vale palmo de vela que remo de galera.
  • Más vale vapor en calderas que alas rastreras.
  • Mejor navega el que tiene buen viento que quien rema con mucho aliento.
  • Mujer, viento, tiempo y fortuna, pronto se muda.
  • Náufrago que vuelve a embarcarse, y viudo que reincide, escarmiento piden.
  • Navío parado no gana flete.
  • No está en mano de piloto que deje el viento su soplo.
  • No existe hombre de mar que no se pueda ahogar.
  • Norte claro, sur oscuro aguacero seguro.
  • Norte oscuro, temporal seguro.
  • No sabe nadar el áncora y siempre va por el agua.
  • No salgas de puerto si las nubes no corren con el viento.
  • No tires remos viejos hasta tener dispuestos los nuevos.
  • Nudo hagas que deshagas.
  • Paralelo navegando, tierra encontrando.
  • Penas y olas, nunca vienen solas.
  • Pisada de patrón, no mancha la vela.
  • Ponte en guardia marinero, lo que al otro le pesa, a ti te espera.
  • Quejase en vano de la mar quien no se cansa de navegar.
  • Quien ande por la mar, aprende a rezar.
  • Quien buen Norte tiene, seguro va y seguro viene.
  • Quien contra el viento quiera mear, por fuerza se ha de mojar
  • Quien el tiempo se expone a predecir, se expone a mentir.
  • Quien está en la mar: navega; y opina quien está en tierra.
  • Quien no hace nada, achica.
  • Quien no mira derrotero, es majadero.
  • Quien no tuviese quehacer, arme navío o tome mujer.
  • San Telmo en la arboladura, mal tiempo augura.
  • San Telmo en cubierta brilla, cierra bien la escotilla.
  • Ser como el bichero que tiene dos ganchos: uno para atracar y otro para desatracar.
  • Si al mar van las gaviotas, marinero a las escotas.
  • Si descarga por el noreste, el capitán no se acueste.
  • Si el grumete supiera y el patrón pudiera, todo se hiciera.
  • Si el mar fuera vino, todo el mundo sería marino.
  • Si el remo rompe la pala, el patrón paga; si rompe por el guion paga el patrón.
  • Si empieza el pulpo a flotar, amenaza temporal.
  • Si hay agua después del viento tu barco andará contento.
  • Si quieres pasar la mar, no te canses de arrizar.
  • Si la lluvia te coge antes que el viento, alista drizas sin perder momento, pero si el viento te cogió primero, iza gavias marinero
  • Si sales a navegar no te canse el preparar.
  • Si es velero el avistado, a maniobrar estas obligado, pues nunca lo debes cruzar ni su marcha molestar.
  • Si se calma el vendaval y por el norte se rola, es probable un temporal con el agua hasta la gola.
  • Si un norte se te ha perdido por el sur anda escondido.
  • Si vas con norte a la mar, ropa de agua has de llevar.
  • Si viene lluvia y después viento, arría todo o métete adentro.
  • Socorro tardío, socorro baldío.
  • Tras mala navegación el puerto sabe mejor.
  • Viento del este lluvia como peste.
  • Zuncho flojo, peor que roto.
  • A joven sur y norte viejo no le fíes tu pellejo.
  • Al viento fuerte el fin le vino, con un aguacero corto y frío.
  • Animales perezosos, tiempo tormentoso.
  • Arrebol a la mañana, a la noche es agua.
  • Arrebol de Oriente, agua amaneciente.
  • Arrebol de todos los cabos, tiempo de los diablos.
  • Arrebol por las noches, a la mañana son soles.
  • Atrás de un aguacero viento menos severo.
  • Aurora rubí, llover luego siempre ví.
  • Ave de mar que busca madriguera anuncia tempestad de esta manera.
  • Barco a la capa, marinero a la hamaca.
  • Barre el cielo el Pampero después de algún aguacero.
  • Buque que a otro alcanza, gobernará sin tardanza.
  • Cielo aborregado, a los tres días mojado.
  • Cielo empedrado, suelo mojado.
  • Cielo jaspeado viento fresco, agarrado.
  • Cielo mellado, el otro día mojado.
  • Cielo rojo a la alborada cuidar que el tiempo se enfada.
  • Cielo rojo al amanecer, el mar se ha de mover.
  • Cielo rojo vespertino, la esperanza es del marino.
  • Cielo sin nubes y estrellas sin brillo, toma a la gavia un ricillo.
  • Coderas y anclas cuidadas evitan tristes garreadas.
  • Con calma y oportunamente, dar atrás es conveniente, si choca y se va a pique, es inútil que se grite.
  • Con el tiempo muy seguro en el verano el sol conduce al viento de la mano
  • Con viento de popa y poco andar el barco se ha de atravesar.
  • Cuando el barómetro oscila lentamente, es que gran viento presiente.
  • Delfines que mucho saltan viento traen y calma espantan.
  • Después de lluvia neblina, hacia buen tiempo camina.
  • Después de lluvia, nevada, a disfrutar la velereada.
  • Después de un aguacero, viento menos severo.
  • El barómetro, si lentamente se eleva es porque el viento se lleva.
  • El que desea mentir, le bastará predecir.
  • En atracadas y desatracadas las hélices deben ser vigiladas.
  • En invierno noche muy clara, el sol que sigue no da la cara.
  • En navegación costera, marca, sonda y corredera.
  • Entre un vapor y un velero, gobernara siempre el primero.
  • Es el SW, aunque suave, seco como el hombre grave
  • Espejismo a la vista, es que mal tiempo se alista.
  • Estate siempre vigilante y ten presente además, si hay riesgo por delante modera, para o ve atrás.
  • Este claro, Norte oscuro Pampero seguro.
  • Estrella con luz brillante cambiara el viento al instante.
  • Gaviota a tierra volando, marinero velas rizando.
  • Hay espacio por delante, toda fuerza marcha avante.
  • Horizonte claro y relampagueante, tiempo bueno y sofocante.
  • La maniobra es imprudente, si de popa es la corriente.
  • La niebla que al aclarar se amontona en sitio dado, el viento viene a anunciar ciertamente de aquel lado.
  • Lluvia del levante, no deja cosa delante.    
  • Lluvia por la mañana iniciada traerá noche mojada.
  • Luna al salir colorada anuncia que habrá ventada.
  • Luna amarilla o rojiza que lloverá profetiza.
  • Luna amarilla y aguada pronostica una mojada.
  • Luna llena y mojada trae diez días de aguada.
  • Luna que presenta halo, mañana húmedo o malo.
  • Maniobra comenzada nunca debe ser variada.
  • Maniobrando marcha atrás, despacio y poco, también es eficaz.
  • Mar rizada contra la ola al contraste el viento rola.
  • Marcación contante te lo llevas por delante.
  • Mucha luz y pocos truenos agua traen por lo menos.
  • Noche de invierno como un primor, día siguiente con sol.
  • Noche de invierno sombría, el siguiente hermoso día.  
  • Norte claro, sur oscuro aguacero seguro.
  • Norte duro, Pampero seguro.
  • Nubes bajas al rastreo, a tierra haciendo su apeo es de buen tiempo el deseo
  • Nubes bajas y con humo, que traen mucha agua presumo.
  • Nubes barbadas viento a carretadas
  • Nubes con franjas o ribetes, aferra bien los juanetes.
  • Nubes tendidas muy azotadas, brisas muy frescas a la portada.
  • Por las nubes cola de gato, viento va a darnos un mal rato.
  • San Telmo en cubierta brilla, pues cierra bien la escotilla.
  • San Telmo en la arboladura mucho viento y mar augura.
  • Si acaso por tu babor la verde se deja ver sigue avante ojo avizor, débese el otro mover.
  • Si a estribor ves colorado debes con cuidado obrar, cae a uno u otro lado, para o manda ciar.
  • Si al mar van las gaviotas...marinero a las escotas!
  • Si ambas luces de un vapor por la proa has avistado, debes caer a estribor dejando ver tu colorado.
  • Si avisto un barco, primero lo marco, luego me entero si es vapor o velero.
  • Si da el verde con el verde o el colorado con su igual, entonces nada se pierde siga a rumbo cada cual.
  • Si después del viento hay truenos seguirán días muy buenos.
  • Si el buque está sin arrancada, no vence viento ni marejada.
  • Si es velero el avistado a maniobrar estas obligado, *pues nunca lo debes cruzar ni su marcha molestar.
  • Si hay agua después del viento tu barco andará contento.
  • Si la lluvia te coge antes que el viento alista drizas sin perder momento, pero si el viento te cogió primero, iza gavias; arriba marinero!
  • Si llueve de madrugada a medio día no pasa nada.
  • Si relampaguea y truena viento habrá de donde suena.
  • Si sales a navegar no te canses de preparar.
  • Si te calma el vendaval y por el Norte se rola es probable un temporal con el agua hasta la gola.
  • Si un norte se te ha perdido, por el sur anda escondido.
  • Si viene lluvia y después el viento arría todo o métete adentro.
  • Sol haciendo su abanico, agua y viento por tu hocico.
  • Sol no afeitado pronto es aguado.
  • Sol poniente en cielo grana, buen tiempo por la mañana.
  • Sudoeste mojado tres días demorado.
  • Tiempo pronto en declararse no tardara en ausentarse.
  • Tiempo que viene despacio, en irse también es reacio.
  • Truenos con luna nueva prepárese a que llueva.
  • Un trueno no repetido nunca buen tiempo ha traído.
  • Viento del Este lluvia como peste.
  • A barco nuevo, capitán viejo.

  • Con ballestrinque y cote no se zafa ningún bote.

  • Cuando al marinero le dan de beber, o esta jodido o lo van a joder.

  • Después de perdido el barco, todos pilotos.

  • Donde manda Capitán, no gobierna marinero.

  • El capitán verdadero, embarca el primero y desembarca el postrero.

  • El muerto es el mar cuando la tierra está lejos.

  • El que ha naufragado teme al mar aún calmado.

  • El que veló, sondó, y desconfió, jamás se perdió.

  • El sueño del piloto, si cierra un ojo abre el otro.

  • En atracadas y desatracadas, las hélices vigiladas

  • En cada costera, mucho se espera.

  • En calma de mar no creas, por sereno que lo veas.

  • En buen tiempo, no faltan pilotos.

  • En el acto de varar, manda la máquina parar.

  • En lo que claramente veo, no brujuleo.

  • En poca agua, poco se navega.

  • Espera que llene la mar para entrar en la canal.

  • Horizonte claro con cielo nublado, buen tiempo declarado.

  • Hay tres clases de individuos: los que viven, los que mueren, y los que estan en la mar

  • Ir a la guerra, navegar y casar, no se ha de aconsejar.

  • La gaviota, cuanto más vieja, más loca.

  • La maniobra comenzada, nunca debe ser variada

  • La maniobra es imprudente, si de popa es la corriente

  • La mar y la mujer de lejos se han de ver.

  • Lancha sin cubierta, sepultura abierta.

  • Lo que sea de la mar, todo es azar.

  • Lo que se promete en la tormenta, se olvida en la calma.

  • Mal hijo y buen marinero, mueren lejos.

  • Mar rizada contra ola, al contraste el viento rola.

  • Mas vale honra sin barcos, que barco sin honra.

  • Más vale palmo de vela que remo de galera.

  • Más quiero perder el navío que ignorar el bajío.

  • Más vale fortuna en tierra, que bonanza en la mar.

  • Mujer, viento, tiempo y fortuna, pronto se muda.

  • El viejo que tiene mujer moza, ojo al timón y mano a la escota.

  • Casa sin mujer y barco sin timón, igual cosa son.

  • Mujer y viento, se mudan al momento.

  • Navigare necesse est, vivere non est necesse.

  • Ni en agosto caminar, ni en diciembre navegar.

  • No está en mano de piloto que deje el viento su soplo.

  • No existe hombre de mar que no se pueda ahogar.

  • No hay buen viento para quien no tiene puerto.

  • No tires remos viejos hasta tener dispuestos los nuevos.

  • Quien el tiempo se expone a predecir, se expone a mentir.

  • Quéjase en vano de la mar quien no se cansa de navegar.

  • Quien ande por la mar, aprende a rezar.

  • Quien buen Norte tiene, seguro va y seguro viene.

  • Quien está en la mar: navega; y opina quien está en tierra.

  • Quien no mira derrotero, es majadero.

  • Si quieres pasar la mar, no te canses de arrizar.

  • Ser como el bichero que tiene dos ganchos: uno para atracar y otro para desatracar.

  • Si el mar fuera vino, todo el mundo sería marino.

  • Si el remo rompe la pala, el patrón paga; si rompe por el guión paga el patrón.

  • El pescador de caña, más come que gana.

  • Si sales a navegar no te canse el preparar.

  • Socorro tardío, socorro baldío.

  • Tras mala navegación el puerto sabe mejor.

  • Viento en popa es medio puerto.

  • Viento en popa y mar bonanza, navega Sancho Panza.

  • Zozobra la verdad, más nunca ahogada la veras.

  • Quien siembra vientos, recoje tempestades.

  • Gaviotas a terra, mariñeiros a merda.

  • Nudo que hagas que deshagas.

Dichos

Un dicho o frase hecha es un conjunto de palabras que se da al expresar algo que no coincide con el sentido literal de las mismas. Pueden aparecer como sinónimos del  modismo  o la  locución adverbial

Marinero

  • A palo seco.  Es decir, en las peores condiciones posibles, sin las velas, "a palo seco".
  • A todo trapo, a toda vela.  Es decir, con todas las velas izadas para ganar velocidad.A toda velocidad.
  • Por los pelos.  Se refiere a la costumbre marinera de dejarse melenas para poder asir de las mismas a los marineros que caían al agua.
  • Dar al traste.  Antigua expresión marinera que significaba naufragar una embarcación.
  • Meterle fuego a la Santa Bárbara.  incendiar el depósito de pólvora para mandar el navío a pique, ante el inminente abordaje pirata.
  • Ser un vivalavirgen.  En las formaciones se pasaba revista nombrando a los marineros y el último debía exclamar  ¡Viva la Virgen! . De este modo, el último en llegar era el de costumbres más desordenadas.
  • Pasar por la quilla.  Castigo marinero consistente en atar a una cuerda a un miembro de la tripulación y lanzarlo al agua pasándolo por debajo del barco tirando de ella."besar la quilla"
  • Traído de los pelos.  Se refiere a la costumbre marinera de asir por los pelos a los marineros que caían al agua, realizando aún el salvatage pero "en precárias condiciones".Se dice de los alumnos que quedan al final del curso en exámenes y consiguen pasar de año con la ayuda de los profesores de la propia mesa examinadora, "pasó, sí; pero traído de los pelos"
  • Viento en popa.  Con todas las condiciones favorables, cuando todo marcha tal como lo deseamos, en referencia al mejor viento que una embarcación de vela puede recibir.
  • Que cada palo aguante su vela.  Cuando se acercan dificultades, cada uno debe asumir su responsabilidad.

Militar

  • Cambiar de chaqueta (o Darse vuelta la chaqueta).  Parece que proviene de la costumbre de voltearse la  casaca . Dicha prenda tenía colores diferentes en cada lado engañando así al enemigo.
  • Carne de cañón . Para referirse a los  soldados  o  tropa  inconsideradamente expuesta a peligro de muerte.  
  • Pasar la noche en blanco/ pasar la noche en vela.  El dicho procede de las  órdenes de caballería  en las que el nuevo miembro debía velar las armas durante toda una noche vestido con una túnica blanca.
  • Mandar a la porra.  La porra era una especie de  bastón  que se clavaba en los campamentos y a donde que se enviaba a los arrestados.
  • Echar con cajas destempladas.  Se refiere al hecho de expulsar a un soldado del campamento para lo cual se aflojaban las cuerdas de los  tambores  (las cajas) y se le despedía con redobles ‘destemplados’.
  • Quedarse en cuadro Cuadros  se refiere a los mandos militares. Si en la batalla se ha perdido a todos los soldados, solo quedan los jefes.

Costumbres

  • Meterse en camisa de once varas.  Cuando se adoptaba un niño, se le hacía pasar por la amplia manga de una camisa en señal de renacimiento."colocarse en situación difícil sin disponer de medios para resolver"
  • Dar cuartos al pregonero .  Antiguamente, si alguien quería que el pregonero anunciara su género, le pagaba con unas monedas. Hoy se utiliza para dar a entender que se ha hecho correr una noticia sobre uno mismo.
  • Irse de picos pardos.  Se refiere a la antigua indumentaria de las meretrices que vestían jubones con picos pardos. Ver artículo picos pardos.
  • De chichinabo .  Expresión que hace referencia a una comida pobre compuesta de chicha y nabo, dos alimentos de poca sustancia.
  • De gorra .  Procedente de los antiguos estudiantes universitarios de los siglos XVI al XVIII que vestidos con grandes gorros eran especialistas en colarse en fiestas y banquetes. El mismo origen tiene la palabra  gorrón .
  • Recoger el guante .  Era la manera de aceptar un duelo después de haber sido retado con el ritual de arrojar el guante.
  • Dejar en la estacada .  Probablemente, se refiere a las empalizadas situadas en el extrarradio de las ciudades en donde se celebraban los duelos y en donde quedaba el peor parado de los contendientes. Cuando los ejércitos se disponían al combate se rodeaban de una estacada, que los protegía sobre todo de la caballería enemiga, cuando el enemigo avanzaba había quien se quedaba defendiendo la primera estacada y el que se retiraba a segundas posiciones. Me dejaron en la estacada, me dejaron solo ante el enemigo.
  • Enmendar la plana.   Plana  se puede entender como folio en donde escribían sus deberes los estudiantes. Enmendar la plana sería por tanto corregir el maestro el trabajo realizado por estos.
  • Poner en la picota.  La picota es una piedra con una punta afilada en que se colocaban las cabezas de los ajusticiados a la entrada de las ciudades.
  • Estar en mantillas .  Se entiende por  mantillas  las prendas y  pañales  de los bebés por lo que la expresión significa carecer de experiencia en algo.
  • Rasgarse las vestiduras.  Costumbre de algunos pueblos antiguos consistente en romperse las ropas en señal de duelo o de ultraje público inesperado.


"La diferencia entre el  dicho  y el  refrán  es que el  dicho  es una expresión popular que por su uso común se va formalizando y un  refrán  es una expresión formada con una moraleja. El  refrán  es una  frase  que presenta en sentido figurado una moraleja. La moraleja es la enseñanza que se extrae de una anécdota o historia".

Proverbio

El  proverbio  (del latín  proverbium ) es un tipo de  paremia , definido como enunciado sentencioso de origen conocido y a menudo con autoría, cuyas características más claras son la antigüedad, el tono grave, la gradación idiomática, la potencial variación y el uso preferentemente culto.

Aunque de difícil clasificación, podrían distinguirse algunas familias de proverbios, aleatoriamente enunciados como axiomas, aforismos, adagio o incluso refranes. Así por ejemplo el grupo de proverbios bíblicos, encabezado por el  Libro de los proverbios ; o bien el conjunto paremiológico en griego y en latín, fruto de las dos grandes culturas de la  Antigüedad clásica  o periodo greco-romano de la  Edad Antigua ; además de los llamados ‘proverbios  orientales ’. También pueden encontrase colecciones enunciadas así en muy diversas otras lenguas o dialectos. Entre las obras ya clásicas de la literatura española pueden mencionarse los  Proverbios y cantares  de  Antonio Machado .


Recopilaciones

En un ámbito mundial podrían citarse antiguas colecciones de construcciones proverbiales como: el  Panchatantra   hindú , la  Gnómica  (poesía de la antigua Grecia); el  Hávamál  de los escandinavos; las  Tríadas galesas , de Bretaña; o el mencionado  Libro de los Proverbios , atribuido al rey israelita  Salomón .

También abundaron las recopilaciones de ‘proverbios’ durante la  Edad Media , como el libro de don  Sem Tob , aparecido durante el reinado de  Pedro I de Castilla , o los de fray  Anselm Turmeda  en catalán. Entrado el  Renacimiento , ya en el siglo xvi  Erasmo  incluyó entre sus escritos una colección de  adagios .

Autores conocidos de interesantes colecciones de provebios, refranes, máximas, etc, fueron por ejemplo el español  Hernán Núñez de Toledo , los Gruter flamencos y alemanes, los ingleses Howell, Ray, Fielding y Kelly, o los Cornazzano en Italia.

En la pintura

Los proverbios flamencos, cuadro de Pieter Brueghel el Viejo.

La idea del  proverbio  ha quedado representada en curiosos cuadros como los pintados por Pieter Brueghel el Viejo, y titulados o traducidos al español alternativamente como  Proverbios flamencos  o  Los refranes neerlandeses .

  • No ha de dormir toda la noche un hombre que toma decisiones.
  • El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona.
  • “Aprender sin pensar es inútil, pensar sin aprender peligroso” Confucio.
  • Hasta un necio pasa por sabio si guarda silencio; se le considera prudente si cierra la boca.
  • Busca la voluntad de Dios en todo lo que hagas, y Él te mostrará qué camino tomar.
  • Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre, y no desprecies la dirección de tu madre.

1. Todos se quejan de falta de dinero, pero de falta de inteligencia, nadie

Este proverbio nos hace una crítica muy fuerte a cómo las personas, tradicionalmente, se han interesado más en la riqueza económica que no en la intelectual. Quien es rico pero no sabe gestionar bien su patrimonio es, desde luego, mucho más pobre que el inteligente que, con muy poca cosa, sabe lo que hacer con ello.

2. Quien no tiene hijos, los educa mejor.

Los padres con amor y conocimiento tratan de educar a sus hijos de la mejor forma pero, en muchas ocasiones, esto cuesta. La situación les desborda y no pueden aplicar la mejor enseñanza a sus hijos porque están muy quemados. En cambio, desde fuera y estando calmada, una persona sin hijos puede saber qué hacer ante una rabieta o enfado de los niños, puesto que podrá pensar de forma más fría, lógica y racional.

3. Mejor morirse de risa que de miedo.

Es mucho más preferible fallecer estando rodeado de felicidad y acompañado por buenas personas antes que morir de miedo y sufrimiento.

4. La experiencia es el nombre que la gente le pone a sus errores.

Nadie nace sabiendo todo. Es necesario que, para ser sabias personas, nos atrevamos a explorar. El ensayo y error es la técnica de aprendizaje más clásica en los seres humanos (y en los no tan humanos también). Solo atreviéndonos a cometer errores y aprender de ellos podremos lograr una verdadera experiencia.

5. El pelo gris es señal de vejez, no de sabiduría.

Es cierto que las personas mayores han vivido mucho, pero esto no es sinónimo de que sepan más. La vejez no deja de ser la prueba de que ha pasado el tiempo, no de que hayamos aprendido más cosas. Las cosas se aprenden mediante la experiencia y adquiriendo nuevo conocimiento, algo que no vendrá hacia nosotros, sino que nosotros debemos ir a él.

6. Hay camino que al hombre le parece derecho, pero al final, es camino de muerte.

El camino más fácil puede ser, también, el camino más inseguro y con mayor riesgo personal. Los grandes resultados se consiguen con los grandes esfuerzos, y en muchas ocasiones los caminos más difíciles son los que mejores resultados nos ofrecen.

7. Guardar silencio es más complicado que hablar bien.

Ser respetuosos y no hablar mal de otras personas es difícil. Nos cuesta contenernos y, a veces, no podemos evitar despotricar de un ser querido, un amigo, un vecino...

Callarse es sano para nosotros y para los demás, puesto que evitamos romper relaciones pero, ¡ojo! callarse las cosas no es siempre bueno y, por eso, debemos saber escoger bien cuándo es el momento y las palabras adecuadas para dar nuestra opinión.

8. El mundo desaparecerá no porque haya demasiados humanos, sino porque hay demasiados inhumanos.

Las buenas personas intentan hacer del mundo un lugar mejor, mientras que las malas lo perjudican. El mundo se irá al garete no porque haya demasiadas personas, sino porque unas pocas no sepan compartir, gestionar bien los recursos y cada una trate de satisfacer sus egoístas necesidades.

9. Dios, ayúdame a levantarme, caerme puedo yo solo.

Nos cuesta muy poco cometer errores, pero conseguir las fuerzas para levantarnos y seguir adelante es otra cosa. La vida son altibajos y, cuando estamos en los valles las cosas las vemos como mucho más difíciles de lo que son.

10. Si la vida no cambia para bien, espera… cambiará para mal.

Si la vida no sigue un buen cauce, tarde o temprano algo saldrá mal y las cosas empeorarán. El mensaje aquí no es que no debemos hacer nada porque las cosas van a ir mal igualmente, sino que debemos tratar de impedirlo y no quedarnos sentados viendo la vida pasar.

11. Por más dulce que sea el amor, no te alimentará.

Todos queremos amar y ser amados. El amor es un sentimiento maravilloso pero que no deja de ser eso, un sentimiento. No podemos dejar que nuestro amor hacia los demás sea prioritario en nuestras vidas porque no nos va a alimentar, ni hará que consigamos un buen trabajo o que consigamos nuestros objetivos vitales. Pensar en los demás está bien, pero más importante es conseguir que nuestra vida tire hacia adelante.

12. Cuando no hay nada que hacer, se inician los proyectos más grandiosos.

No hay que desesperar nunca. Muchas grandes cosas se han conseguido cuando todas las opciones se había agotado. A veces puede surgir un milagro que resuelva todo o que nos ofrezca una nueva forma de hacer las cosas. Lo más importante es no abandonar.

13. Al elegir entre los males, el pesimista elige ambos

Muchas cosas pueden salir mal en la vida. Si siempre vemos las cosas mal, no nos vamos a conformar con uno de esos males, sino que nos podremos en el peor escenario posible y nos vamos a imaginar que todo, absolutamente todo, puede salir mal.

14. Si la caridad no costara nada, todos seríamos filántropos.

La caridad siempre cuesta algo, puesto que implica, en mayor o menor medida, un sacrificio. Ya sea dando dinero, bienes o invirtiendo tiempo, la caridad implica ofrecer algo nuestro a otras personas quienes más lo necesitan. Debido a esto, la caridad no es gratis y por esto no todo el mundo lo es. Si no costara nada todo el mundo intentaría hacer del mundo un lugar mejor.

15. Los padres les enseñan a los hijos a hablar, y los hijos les enseñan a los padres a guardar silencio.

Siempre debemos estar agradecidos a nuestros padres porque ha sido gracias a sus esfuerzos que han conseguido que nosotros tengamos lo que tenemos, tanto en lo material como en lo intelectual y personal. Nos han enseñado a hablar para que podamos expresarnos, dar nuestras opiniones y pedir. Muchos, lamentablemente, mandan a callar a sus padres porque no les interesa saber qué dicen en un acto de terrible egoísmo.

16. Desde lejos toda la gente es buena.

A medida que conocemos más de cerca a alguien vemos sus virtudes y, claro está, sus defectos.

17. Tanto un invitado como un pescado empiezan a oler mal al cabo de tres días.

Hay que saber poner límites de tiempo a nuestras visitas. Si dejamos que alguien pase demasiado tiempo con nosotros, ya sea en nuestra casa o en nuestros círculos sociales, tarde o temprano empezará a asquearnos. Poner distancia, en muchas ocasiones, es lo mejor para una amistad.

18. El conocimiento no ocupa mucho lugar.

Aprender nunca está de más. Cuanto más sepamos, mejor. Por muchos años que tengamos o muchas carreras que hayamos logrado nunca debemos dejar de aprender, sentir curiosidad hacia el mundo que nos rodea y expandir nuestro conocimiento.

19. El ser humano debe vivir, aunque sea por curiosidad.

Nuestras vidas pueden ser muy tristes o aburridas, pero no es excusa para dejar de vivirlas. Siempre pasará algo que nos despierte el interés y la motivación, algo que, quizás, sea un giro de 180º y cambie por completo nuestra vida.

20. El sordo escuchó cómo el mudo dijo que el ciego vio cómo un cojo corría más rápido que un tren.

El significado de este proverbio es claramente muy instructor. Viene a decir que no podemos fiarnos de la palabra de alguien que no sabe o no tiene habilidad de lo que está hablando. Al igual que el sordo no puede oír o el ciego no puede ver, no podemos fiarnos de la opinión de alguien quien, sin saber ya de base, ha oído la opinión de otra persona que tampoco sabía de qué estaba hablando.

21. Dios protege a los pobres al menos de los pecados caros.

Cuanto menos se tiene, menos lujos se consumen, y entre esos lujos siempre hay algún vicio pecaminoso o algo que remueve conciencias. Dentro de lo que cabe, las personas que menos tienen pueden estar protegidas de adicciones en las que se invierte mucho dinero.

22. Si un problema puede ser resuelto con dinero, no es un problema, es un gasto.

Este proverbio se entiende muy fácil. Quien tiene dinero prácticamente tiene la vida resuelta. Todo problema que le pueda surgir lo hará desaparecer poniendo dinero, algo que no le supondrá mucho esfuerzo.

23. Dios le dio al ser humano dos oídos y una boca para que escuchara más y hablara menos.

Debemos escuchar todo lo que nos tienen que decir antes de dar nuestra opinión. No podemos opinar sin saber todos los detalles de la situación en concreto, de lo contrario, corremos el riesgo de llevarnos una falsa impresión.

24. No seas dulce, o te comerán. No seas amargo, o te escupirán.

Hay que ser amables con las personas, pero no dejar que se aprovechen de nosotros. Tampoco debemos ser desagradables con los demás, por mucho miedo que tengamos de que se puedan aprovechar de ello. Todo tiene su moderación: debemos ser amables pero saber cuándo poner límites y defendernos de la injusticia.

25. No te acerques a una cabra por delante, a un caballo por detrás y a un tonto por ningún lado.

Debemos ser cuidadosos con quienes nos acercamos. Si nos acercamos a una cabra por delante, esta nos embestirá y nos hará daño. Si nos acercamos a un caballo por detrás, este nos dará una coz y nos hará daño. Si nos acercamos a un ignorante, que no sabe lo que hace o dice, tarde o temprano recibiremos algún daño. Hay que evitar a las personas necias a toda costa.

26. Los pájaros cantan no porque tienen respuestas sino porque tienen canciones.

Los pájaros cantan no solo para llamar a su potencial pareja reproductiva, sino porque pueden disfrutar de sus bellas melodías. Lo mismo pasa con quien tiene una oportunidad o una habilidad: la usa porque puede. Si podemos tocar el piano, jugar al futbol, darle un beso a nuestra pareja o bailar lo aprovecharemos y lo haremos, así de simple.

27. Con tiempo y paciencia, la hoja de morera se convierte en seda.

La paciencia es lo que hará que grandes proyectos puedan salir a la luz. No podemos esperar respuestas y resultados rápidos que sean de calidad. Todo lo bueno se hace esperar, empezando por lo más caótico y simple para acabar en un completo proyecto, sea el que sea.

28. Un viaje de mil millas ha de comenzar con un simple paso.

Para conseguir que un proyecto siga adelante es necesario tomar un simple paso, el primero. Para llegar al final de la meta que nos hemos planteado es fundamental haber superado el inicio del camino.

29. Rápido es despacio, pero sin pausas.

Todos queremos que las cosas buenas acaben pasando, como pueden ser nuestros más deseados proyectos, pero debe haber constancia y dedicación. No podemos hacer las cosas al final y deprisa, dado que así no vamos a tener buenos resultados. Es preferible dedicarle un poco cada día, dedicándole su tiempo y cuidado, antes que pretender conseguir inspiración divina y acabar un proyecto u objetivo de una sola vez.

30. Aquel que no viaja no conoce el valor de los hombres.

Todos nos hemos criado en una cultura que ha moldeado nuestra forma de ver al mundo y a las personas. Viajando y conociendo las visiones de otras partes del mundo nos permite conocer más a fondo como es el ser humano, sin tener el sesgo que nuestra cultura nos ha dado.

31. Mientras andas el camino de la vida, verás un gran abismo. Salta. No es tan ancho como crees.

Nuestra vida es un camino y son pocos los momentos en los que será un lecho de rosas. Tarde o temprano nos encontraremos con una dificultad que tendremos que enfrentar si queremos continuar nuestro camino. Es necesario un poco de riesgo y exploración para poder seguir adelante y conseguir aquello que nos planteemos.

32. Agua que no has de beber, déjala correr.

Aquello que no necesitamos no debemos esforzarnos en conseguirlo. Si no es algo que nos vaya a beneficiar o que pueda ayudarnos a ser más felices o mejores personas, ¿para qué luchar por ello?

33. Las lágrimas derramadas son amargas, pero más amargas son las que no se derraman.

La tristeza es una emoción muy humana, desagradable aunque necesaria. Es cierto que nos duele, pero más nos dolerá no compartir con alguien por qué nos sentimos así. Liberando esta emoción evitamos sentirnos peor después.

34. Cuando naciste, lloraste y el mundo se regocijó. Vive tu vida de modo que cuando mueras, el mundo llore y tú te regocijes.

Cuando nacemos, todos lloramos. Parece que lleguemos al mundo con miedo y tristeza. A lo largo de la vida viviremos todo tipo de vivencias, pero lo más importante es que, en su conjunto, nuestra vida haya sido feliz y plena. Si es así, al llegar al lecho de muerte veremos que hemos tenido una gran vida y que partimos siendo felices, en compañía de quienes nos han amado y que nos echarán de menos.

35. Donde el agua manda, la tierra debe obedecer.

El agua es el origen de la vida. La tierra, por muy estéril que haya sido, en el momento en que le caen unas pocas gotas puede convertirse un un verdadero vergel. Este agua representa el conocimiento de las personas mayores, que “riegan” a los más pequeños como si fueran macetas en donde van a albergar la semilla del conocimiento.

36. Nunca llovió que no se despejara.

La vida tiene momentos en los que nos sentimos tristes y desesperanzados. Puede que hayamos perdido a un ser querido o que nuestra pareja haya roto con nosotros. Son situaciones desagradables pero que forman parte de la vida y, tarde o temprano, el desánimo se pasará y vendrán tiempos felices. Después de la tormenta siempre viene la calma.

37. Al nopal lo van a ver sólo cuando tiene tunas.

Las tunas son los frutos dulces del nopal, un tipo de cactus. Los cactus pinchan, al igual que las personas tóxicas o desagradables. Cuando estas personas tienen buenas noticias o algo que ofrecer a los demás, de repente, son más populares y se convierten en el centro de atención, fama que les durará bien poco.

38. Cada uno ama al árbol que le da cobijo.

Cada uno busca la seguridad y la comprensión en la persona que crea más conveniente, sea o no verdaderamente un buen apoyo. Hay quienes lo buscan en la familia, otros en los amigos y otros en algunas malas compañías que, pese darles cobijo, también los meten en problemas.

39. Cuando el pastor regresa a casa en paz, la leche es dulce.

Cuando estamos satisfechos con lo que hemos hecho y no tenemos ningún remordimiento ni asunto pendiente, vivimos la vida con mayor felicidad y tranquilidad.

40. Incluso los monos se caen de los árboles.

Este proverbio tiene un mensaje muy importante, y es el de que incluso las personas que más saben pueden cometer errores. Errar es humano, algo que incluso los más expertos y versados en una determinada materia hacen. Nunca debemos reprocharle a alguien que se haya equivocado como si fuera un incompetente en lo que hace, puesto que un mal día lo tenemos todos.

41. No importa cuán hermoso y bien hecho esté el ataúd, no hará que las personas deseen la muerte.

Podemos haber vivido una vida llena de dones y beneficios, en la que no nos faltó ni nos arrepentimos de nada. Sin embargo, todos queremos vivir un poco más, especialmente si nuestra vida no es un continuo tormento. Por muy bonito que sea el final de nuestras vidas nunca querremos que llegue.

42. Aquel que corre buscando dinero, se aleja de la paz.

El dinero es necesario en nuestras vidas, pero tampoco debe ser lo que nos obsesione. El amor, la familia, nuestras aficiones y, en definitiva, lo que nos hace ser felices son aspectos que no debemos dejar de lado, por mucho que necesitemos el dinero. Si nos centramos única y exclusivamente en el dinero, desesperados cada vez más para conseguirlo, no lograremos tener calma ni felicidad.

43. Si levantas un extremo del garrote, también levantas el otro.

Cuanto más radicales nos volvemos con respecto a nuestras opiniones, es esperable que nuestros “adversarios” también lo hagan. Pasamos de ver el mundo en matices a verlo en blanco y negro, algo peligroso puesto que “matamos” el sano ejercicio de relativizar lo que decimos y pensamos, fundamental para relacionarse pro socialmente con los demás.

44. El pequeño pájaro no canta hasta que oye a los mayores.

Este sabio proverbio africano viene a decir que los niños aprenden de sus mayores, tanto en conocimiento como en opiniones. Un niño es como una tábula rasa: no sabe hablar, no sabe cómo va el mundo ni sabe cómo opinar. Es estando en contacto con su entorno que aprende cómo funciona lo que le rodea, además de sacar sus propias conclusiones, sesgadas por lo que sus adultos de referencia le hayan inculcado.

45. Se necesita una aldea para criar a un niño.

Este proverbio es tradicional de África, y no es de extrañar puesto que ahí la educación, sobre todo en las aldeas, es asunto de toda la comunidad. No son solos los padres quienes se encargan de sus hijos, sino que, también, los niños mayores, los vecinos, otros parientes y demás miembros de la aldea ofrecen un poco de su conocimiento para que el niño vaya adaptándose al mundo que le ha tocado vivir.

46. A nuestros hijos, deseamos legarles dos cosas: la primera es raíces, la segunda es alas.

Todos los padres quieren que sus hijos recuerden el sitio donde se criaron, que no olviden lo mucho que le deben a sus padres y otros adultos de lugar. Pero, además de esto, todos los padres quieren que sus hijos sean libres, que puedan prosperar en la vida sin necesidad de recurrir a sus padres una vez ya son adultos.

47. Una palabra bondadosa puede calentar tres meses de invierno.

Por muy tristes, solos y desesperanzados que estemos, teniendo buenos amigos, familiares que nos apoyen o gente a la que le importemos podremos encontrar algo de calor dentro del gélido invierno que se puede convertir una mala época. Gestos tan simples como una buena palabra, un abrazo o un gesto de empatía cualquiera pueden ayudarnos a superar la adversidad.

48. Piensa lo que quieras pensar, pero no olvides que tienes que convivir todos los días con tus propios pensamientos.

Cada uno es libre de pensar lo que quiera, pero no es libre de deshacerse de sus pensamientos. No puede evitar que esas palabras, positivas o negativas, resuenen como un eco en lo más profundo de la cueva de su mente. Debemos pensar bien lo que opinamos, para relativizarlo y evitar quedar atrapados en el rencor o en los malos recuerdos.

49. Aquel que no es capaz de bailar dice que el piso es pedregoso.

Quien no sabe y no quiere intentar mejorar dirá que la situación que le ha tocado vivir es difícil. Es cierto que puede que haya cosas que no podamos controlar, pero desde luego la fuerza de voluntad, las ganas de probarlo y el interés en mejorar son aspectos que vienen de nosotros.

50. El que siembra su maíz, que se coma su pinole.

Este proverbio mexicano tiene el mismo significado que el de “cada uno cosecha lo que siembra”. Lo que decimos y hacemos tendrá unas consecuencias, positivas o negativas, pero siempre proporcionales. Por eso hay que vigilar con lo que se hace.

51. No hables demasiado, si no quieres errar.

Quien habla mucho tarde o temprano hablará de algo de lo que no tiene ni idea y, por lo tanto, cometerá errores. Por eso es mejor hablar lo justo, de aquello que sí sabemos y, así, evitar situaciones incómodas.

52. Una mosca puede perturbar a un león más de lo que el león puede perturbar a la mosca.

Incluso las personas más grandes, expertas en lo suyo o muy seguras pueden, a veces, tener dificultades o inseguridades por las más simples y pequeñas cosas.

53. Una rana en un estanque no sabe que existe el mar.

Quien nunca ha salido de su zona, sea su lugar de nacimiento o la zona de confort, no sabe lo que se pierde ahí afuera. Explorar siempre ensancha nuestros horizontes, nos ofrece nuevas experiencias y nos hará tener una vida más rica.

54. Si tu única herramienta es un martillo, todos los problemas te parecerán un clavo.

Las personas más cortas de vista verán en todas las situaciones el mismo problema y, por lo tanto, intentarán aplicar la misma solución. Tratar de tener una visión más amplia, consultando a otras personas qué es lo que harían o, en caso de que sea necesario, acudir a varios profesionales es la mejor manera de curarse de espanto.

55. La sabiduría es como un árbol de baobab: nadie puede abarcarlo individualmente.

El conocimiento es tan extenso que una sola persona no lo puede dominar. Es por esto que necesitamos la opinión de varias personas que tengan dominios de los más variopintos para poder abordar en su conjunto todo el saber habido y por haber.

56. La muerte de un anciano es como la quema de una biblioteca.

Los ancianos son sabios. No es que la edad sea sinónimo de sabiduría, pero sí de haber vivido más experiencias de las cuales, en caso de que hayan sabido cómo extraerles el jugo, habrán ganado conocimientos. Cuando fallecen, son tantos los conocimientos que se pierden que compararlo con una quema de una biblioteca se queda corto.

57. El enojo y la locura son hermanos.

El enfado es una emoción natural, sin embargo, si dejamos que nos domine habrá un momento en que perderemos el control y la cordura. No responderemos de forma adaptativa ante las adversidades de la vida, lo cual nos hará perder muchas oportunidades. Nos sentiremos muy frustrados y desdichados.

58. No sigas a una persona que está huyendo.

Si alguien tiene sus propios problemas, debemos evitar ser uno más para él. Además, para evitar acabar como él lo más importante es evitar cometer sus mismos errores.

59. Todos estamos hechos del mismo barro, pero no del mismo molde.

Las personas merecemos el mismo respeto en tanto que somos seres humanos. Ahora, también debemos entender que cada uno es como es. La premisa fundamental de este proverbio es que debemos respetar la diversidad, sin olvidarnos de que todos merecemos los mismos derechos y cumplir con las mismas obligaciones.

60. El que quiere amigos sin defectos, no tendrá ninguno.

Nadie es perfecto. Todos tenemos nuestras fortalezas y debilidades. No podemos pretender rodearnos por personas perfectas, lo mejor de lo mejor, porque siempre tendrán algún defecto, además de que nosotros mismos tampoco somos un ejemplo de perfección. Lo mejor es saber valorar lo que se tiene y aceptar a nuestros seres queridos tal y como son, puesto que de sus defectos podemos aprender mucho.

61. Para ver los errores ajenos no se necesitan gafas.

Nos cuesta ver lo bueno de los demás, pero lo malo es muy sencillo de ver. Los errores que han hecho otras personas es, en muchas ocasiones, lo primero que vemos. Lo difícil de aceptar es que esas demás personas hagan ese mismo ejercicio.

62. Antes de cambiar el mundo, da tres vueltas por tu casa.

No podemos mejorar el mundo si no mejoramos nuestras propias vidas ni entorno más cercano. Hay muchas cosas que tenemos la capacidad de cambiar, pero que no lo hemos hecho todavía porque o bien no somos conscientes de ello o bien no nos hemos atrevido. Si no empezamos por aquí, muy difícilmente mejoraremos el mundo. De este proverbio podríamos extraer la idea del “actúa local, piensa global”.

63. Lo pasado ha huido, lo que esperas está ausente, pero el presente es tuyo.

Lo hecho está hecho, no lo podemos cambiar. El futuro todavía no ha llegado, así que, de momento, no lo podemos cambiar. Sin embargo, el presente sí que lo podemos cambiar, puesto que está ocurriendo ahora mismo. En vez de lamentarnos por el pasado o desear el futuro, lo que debemos hacer es trabajar el tiempo actual para que, así lo que tenga que venir sea mejor.

64. La gente se arregla todos los días el cabello. ¿Por qué no el corazón?

Las personas nos preocupamos más por nuestra imagen exterior, como la belleza o las falsas apariencias, antes que nuestra salud emocional. Este proverbio nos hace reflexionar sobre cómo deberíamos darle más importancia a nuestro bienestar psicológico antes que preocuparnos por la imagen visual que ofrecemos.

65. Si lo que vas a decir no es más bello que el silencio no lo digas.

Si vamos a decir algo que sea para enriquecer la conversación. Nadie quiere escuchar una opinión que no aporta nada o que se diga algo que todos ya sabían, ¿qué necesidad hay en decirlo? En muchas ocasiones, estarse calladito es lo mejor.

66. La primera vez que me engañes, será culpa tuya; la segunda vez, la culpa será mía.

Engañar está mal, pero dejarse engañarse es peor. Las personas debemos aprender de nuestros errores, siendo el caer en el engaño uno de ellos. Repetir el mismo error una y otra vez es, indiscutiblemente, culpa nuestra, una demostración de que muy espabilados no somos.

67. Un libro abierto es un cerebro que habla; cerrado un amigo que espera; olvidado, un alma que perdona; destruido, un corazón que llora.

Los libros son una fuente de conocimiento indiscutible. Siempre debemos leerlos y tratarlos bien. Lo que nunca se debe hacer es destruirlos, puesto que con ellos se pueden perder muy interesantes conocimientos o la visión de un gran pensador.

68. Quien no comprende una mirada tampoco comprenderá una larga explicación.

Las palabras nos dicen muchas cosas, pero los gestos que hace una persona nos puede indicar cómo se siente, si está nerviosa, triste o insegura. Si no sabemos reconocer estas micro expresiones es muy difícil que podamos comprender la profundidad de lo que nos tenga que explicar.

69. La paciencia es un árbol de raíz amarga pero de frutos muy dulces.

La paciencia es fundamental si queremos lograr buenos resultados en nuestra vida. Es difícil tener que esperar pero, una vez lo hemos conseguido, los resultados sientan verdaderamente bien.

70. Si te caes siete veces, levántate ocho.

Nunca debemos rendirnos. Por muchas veces que nos haya salido algo mal, deberemos repetirlo tantas veces como sea necesario hasta que nos salga bien. El fracasado no es quien ha perdido, sino quien ni lo ha intentado.

71. Caer está permitido, levantarse es una obligación.

Muy en la línea del proverbio anterior, solo que esta vez con un tono más imperativo. Viene a decir que tropezarnos, fallar en la vida o errar es algo natural e inevitable. Es normal que no lo hagamos siempre perfecto, queramos o no. Lo que sí que podemos controlar es el volverlo a intentar. No podremos prosperar si lo dejamos ahí.

72. Estaba furioso de no tener zapatos; entonces encontré a un hombre que no tenía píes, y me sentí contento de mi mismo.

Todos deseamos muchas cosas en nuestra vida, y nos comparamos con quienes tienen más. Sin embargo, ¿qué pasa con quienes tienen menos? Saber valorar lo que se tiene es un aspecto fundamental para lograr la verdadera felicidad.

73. Cuando te inunde una enorme alegría, no prometas nada a nadie. Cuando te domine un gran enojo, no contestes ninguna carta.

La felicidad, el enfado y la tristeza junto con otras emociones forman parte de nuestras vidas. Las emociones son adaptativas, pero hay que saber controlarlas y evitar que nos hagan cometer graves errores. Las emociones nos pueden cegar y hacernos tomar malas decisiones, las cuales, una vez estemos más calmados, nos harán arrepentirnos profundamente.

74. Con una mentira suele irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver.

Si nos pasamos mintiendo habrá un momento en el que habremos dicho tantas mentiras que cualquier verdad entrará en directo conflicto con ellas. No podremos seguir con ello por mucho más tiempo, habiendo un momento en el que tendremos que reconocer cuánto hemos mentido, sintiendo vergüenza y humillación. Es por esto tan importante no decir mentiras, ser honesto siempre y explicar los hechos, sean buenos o sean malos.

75. Bienaventurado el hombre que halla sabiduría y el hombre que adquiere entendimiento.

Aprender nunca está de más, por eso todo conocimiento es portador de dicha y felicidad, y debemos agradecer que esto sea así, porque no todas las personas tienen la oportunidad de poder recibirlos.

76. Ciertamente sufrirá el que sale fiador por un extraño, pero el que odia salir fiador está seguro.

Debemos confiar únicamente en aquellas personas que se lo merecen, que son dignas de nuestra confianza. De lo contrario podríamos llevarnos más de una decepción, como que alguien cuente nuestras intimidades o nos mienta descaradamente con la intención de aprovecharse de nosotros.

77. Delante de la destrucción va el orgullo, y delante de la caída, la altivez de espíritu.

Pecar de orgullo, teniendo una actitud demasiado prepotente y menospreciar a los demás puede hacer que nos ganemos muchos enemigos. Esto puede hacer que nuestra vida social se desmorone, quedándonos en la más profunda soledad y tristeza. Debemos ser humildes, saber ver lo bueno en los demás y enorgullecernos de lo que realmente sí somos buenos.

78. Echa tu suerte entre nosotros; tengamos todos una bolsa.

Cada persona debe asfaltar su propio camino, independientemente de lo que las demás personas opinen, hagan o digan sobre ella. Cada uno es responsable de su propio destino, es decir, se labra su propio porvenir.

79. El de sabio corazón acata las órdenes, pero el necio y rezongón va camino al desastre.

Los conocimientos que vamos adquiriendo a lo largo de nuestras vidas son aquellos que nos librarán de disgustos. Cuando más tengamos, más precavidos seremos puesto que detectaremos más fácilmente quienes no saben de lo que están hablando o quienes tienen interés en aprovecharse de nosotros.

80. El que detiene el castigo aborrece a su hijo, pero el que lo ama se esmera en corregirlo.

Aquella persona que más nos quiere más nos hará sufrir. Las personas que se preocupan por nuestro bienestar y felicidad intentarán corregir, desde el amor, el respeto y la empatía, aquello malo que estamos haciendo y que, de continuar así, nos acabaría haciendo daño.


Proverbios

Proverbios  (hebreo  מִשְׁלֵי Mishlei ) es un libro bíblico del Antiguo Testamento y del Tanaj hebreo, que se clasifica entre los Libros Sapienciales del cristianismo, y entre los Ketuvim o "Escritos" del judaísmo. Está compuesto por extensas colecciones de máximas o sentencias de contenido espiritual, social, ético y moral, se ubica en la Biblia entre el libro de los Salmos y Eclesiastés, y en la Biblia judía entre los libros de Job y Rut.

El libro de los Proverbios en una Biblia de 1497.

Adagio 

Un adagio es una expresión corta, fácil de memorizar que contiene algún elemento de conocimiento o experiencia importante, considerado cierto por mucha gente, y/o que ha ganado cierta credibilidad a través de su uso continuado.

Los adagios pueden ser observaciones interesantes, guías  éticas  prácticas o comentarios  pesimistas  sobre la vida en general o alguno de sus aspectos. Algunos adagios son producto de la  sabiduría popular , que intenta resumir alguna verdad básica; este tipo se conoce generalmente como  proverbio  o  refrán . Si describe una regla general de conducta, se conoce como máxima.

Por su parte, una expresión no necesariamente muy hermosa o graciosa, pero que goza de una especial profundidad o un buen estilo, se conoce como  aforismo , mientras que una con  humor  o  ironía  recibe el nombre de  epigrama . A través del uso excesivo, un adagio puede convertirse en un  cliché  o un  lugar común .

En la actualidad

Los adagios empleados pueden recibir nombres propios y ser llamados «leyes», en una imitación humorística de las leyes físicas, o principios. Algunos adagios, como la ley de Murphy, son formulados de manera informal y luego reciben un nombre, mientras que otros, como el Principio de Peter, tienen nombres ya desde su misma formulación; se puede argumentar que el segundo tipo no constituye un adagio "verdadero", pero ambos tipos suelen ser difíciles de distinguir.

Usos

Los adagios formulados en obras de ficción populares suelen derivar hacia la  cultura popular , especialmente cuando existe una subcultura devota del género que corresponda, como es el caso de las novelas de ciencia ficción. Muchas profesiones y subculturas crean sus propios adagios, que pueden entonces ser considerados como una especie de jerga; ese tipo de adagios pueden llegar a ser empleados por el público en general, a veces siendo alterados en el proceso. Las comunidades virtuales como las que se desarrollan en foros o grupos de noticias de Internet, también suelen crear sus propios adagios.

  • Mejor tarde que nunca.
  • Quien mal camina termina.
  • Tienes que dar el primer paso.
  • No desafíe la naturaleza.
  • La ley es dura pero es ley.
  • Todo lo que inicia termina.
  • Es la naturaleza humana.
  • Es un costo que debemos pagar.


Citas

En  paremiología , es una hoja que se le llama  retórico  que consiste en reproducir un fragmento de una  expresión  humana respetando su formulación original (en caso contrario se trata de  paráfrasis ) insertándolo en un  discurso  propio, generalmente también acatando el tipo de  canal  en que se comunicó originalmente, con los objetivos de funcionar como:  

  • Fuente de información adicional

  • Contexto referencial

  • Reafirmación de autoridad

  • Medio de divulgación de:

  1. El autor

  2. Concepto original de estos

Regularmente una cita puede tratarse de una  paremia : reproducción de una  frase refrán o proverbio  que ha logrado cierta trascendencia (por la idea misma o en virtud de la  autoría ). Por ello, para interpretar su significado, es muy probable que un interlocutor no necesite más información.

Ampliamente usada en las  artes , especialmente en la  literatura , una parte de una obra se reproduce en otra para reforzar su significado, lo cual potencia la trascendencia de ambos textos. También puede ser para reformularlo o cuestionarlo, o bien incluso refutarlo.

En los casos de  canciones  o de  películas  —de las cuales por una reproducción exacta y más extensa de una obra en otra se corre el riesgo de incurrir en  plagio — la cita tiende a ser más  ambigua ,

  • No existe sustituto alguno para la falta de previsión y conocimientos sobre cómo actuar con mal tiempo" Peter Blake.
  • "Un barco no debería navegar con una sola ancla, ni la vida con una sola esperanza" Epitecto
  • "Lo terrible del mar es morir de sed" Gustavo Cerati
  • "El que no sabe por qué camino llegará al mar, debe buscar el río por compañero" John Ray
  • "Cuando no sopla viento, incluso la veleta tiene carácter” StanislawJerzyLec
  • "No hay nada más seductor y esclavizante que la vida humana en el mar” Joseph Conrad
  • "A veces sentimos que lo que hacemos es tan solo una gota en el mar,pero el mar sería menos si le faltara una gota" T.Calcuta
  • "Para aprender a rezar no hay como viajar por mar" Proverbio Inglés
  • "Debe haber algo extrañamente sagrado en la sal: está en nuestras lágrimas y en el mar" Khalil Gibran
  • "El mar dará a cada hombre una nueva esperanza, como el dormir le da sueños" Cristóbal Colón
  • "Para surcar mejores aguas despliega ahora las velas la navecilla de mi ingenio, que deja tras de sí un mar tan cruel" Dante Alighieri
  • "El romper de una ola no puede explicar todo el mar" Vladimir Nabokov
  • "No acometas obra alguna con la furia de la pasión: equivale a hacerse a la mar en plena borrasca" Thomas Fuller

Adivinanza

Una adivinanza es un tipo de  acertijo  con enunciado, generalmente en forma de  rima

Se tratan de  enigmas  sencillos en los que se describe una cosa de forma indirecta para que alguien lo adivine. En el enunciado se incluyen pistas para su solución. Muchas adivinanzas están dirigidas al público infantil, con un componente educativo, para representar tradiciones y conceptos básicos como animales, frutas o toda clase de objetos.

Las adivinanzas se plantean en diferentes formatos de métrica y composición, si bien son comunes los versos octosílabos, las estrofas de dos o cuatro versos y las rimas asonantes y consonantes. También son frecuentes los  juegos de palabras .

Blanco por dentro, verde por fuera. Si no lo sabes, espera.

Se desconoce cuándo se planteó la primera adivinanza, pero se tiene constancia de su práctica en textos  sánscritos , en la  Biblia  y en leyendas clásicas. Una de las más tradicionales es el acertijo de la  esfinge , personaje de la  mitología griega :

¿Cuál es el ser vivo que camina a cuatro patas al alba, con dos al mediodía y con tres al atardecer?

Representación de  Edipo  y la  esfinge , un ejemplo de adivinanzas y acertijos en la  mitología griega .


  • "Soy el que jamás descansa y va y viene sin cesar. Nunca me puedo secar. Jamás te aburre mi danza. En presencia o añoranza tú siempre me vas a amar." (El mar)
  • "Adentro no hay quien me alcance y si salgo sufro un percance." (El pez)
  • "¿Qué cosa es… ¿Qué cosa es… que corre mucho y no tiene pies?." (El viento)
  • "No creo que salga del agua nadando pero está en tu nalga si te estás bañando.‭" (El alga)
  • "Si sube, nos vamos. Si baja, nos quedamos.‭" (El ancla)
  • "Las hijas de este animal son pequeñas y delgadas, pero por su gran sabor, son muy caras y apreciadas.‭" (La anguila)
  • "Un truquito este pez tiene que no todo el mundo sabe: si a su nombre quitas la «ene», va y se transforma en ave.‭" (La anguila)
  • "El que lo pica se hace pez, ¿Quieres que te lo diga otra vez?‭" (El anzuelo) *"Lleva años en el mar y aún no sabe nadar.‭" (La arena)
  • "Que lo busquen en el mar, porque en la tierra por más que aren, que aren, que en la tierra no lo encuentran.‭" (El arenque)
  • "Iba una vaca de lado, luego resultó pescado.‭" (El bacalao)
  • "Sobre la vaca, la «o», a que no lo aciertas, no.‭" (El bacalao)
  • "Es la reina de los mares, su dentadura es muy buena, y por no ir nunca vacía, siempre dicen que va llena.‭" (La ballena)
  • "Uso aguja sin coser, corto sin tijeras, y ando sin pie.‭" (El barco)
  • "No lo parezco y soy pez, y mi forma la refleja una pieza de ajedrez.‭" (El caballito de mar)
  • "Tengo tinta, tengo plumas y brazos tengo, además, pero no puedo escribir, porque no aprendí jamás.‭" (El calamar)
  • "En una cala del mar, aunque con muy mala pinta, dispuesto para pintar utilizando su tinta‭".(El calamar)
  • "Hay ocho que están en pie, dos a punto de aferrarse y dos ojos desafiando."(El cangrejo)
  • "Dos pinzas tengo, hacia atrás camino, de mar o de río, en el agua vivo.‭" (El cangrejo)
  • "Adivina quien yo soy: al ir parece que vengo, y al venir, es que me voy.‭" (El cangrejo)
  • "Tengo el nombre de una niña, crezco en el fondo del mar y en la arena de la playa tú me puedes encontrar.‭" (La concha)
  • "Vivo en el mar sin ser pez y soy siempre juguetón; nunca me baño en el Rhin, pues soy el mismo del fin.‭" (El delfín)
  • "Sin estrujarte el testuz y rápido cual centella, ¿sabrás decirme qué estrella nunca jamás tiene luz?‭" (La estrella de mar)
  • "Cinco brazos, no te miento, habita siempre en el mar, aunque la puedes hallar de noche en el firmamento.‭" (La estrella de mar)
  • "Con su risa mañanera toda la playa alborota, pescadora y marinera‭". (La gaviota)
  • "El cielo y la tierra se van a juntar; la ola y la nube se van a enredar. Vayas donde vayas siempre lo verás, por mucho que andes nunca llegarás.‭" (El horizonte)
  • "En mí se mueren los ríos, y por mí los barcos van, muy breve es el nombre mío, tres letras tiene, no más‭". (El mar)
  • "Soy pequeño y alargado, en dos conchas colocado, como no puedo nadar, me pego a las rocas del mar‭". (El mejillón)
  • "En dos castañuelas voy encerrado y al sacarme del mar me pongo colorado,‭" (El mejillón)
  • "Haciendo ruido ya vienen, haciendo ruido se van; y, cuando mañana vuelvan, de igual manera se irán." (Las olas)
  • "No pienses en otras cosas, que las tienes en el mar, o las ves llegar furiosas, o las ves mansas llegar.‭" (Las olas)
  • "Llegamos sin cesar, una tras otra, desde el mar a la playa a descansar. A veces, sin embargo, más furiosas, los barcos podemos destrozar.‭" (Las olas)
  • "Estando quieto en mi casa, me vinieron a prender; yo quedé preso y mi casa por las ventanas se fue.‭" (El pescado atrapado en la red)
  • "Soy chiquitito, puedo nadar, vivo en los ríos y en alta mar.‭" (El pez)
  • "¿Qué bicho dirás que es, que es algo y nada a la vez?‭" (El pez)
  • "Adentro no hay quien me alcance, si salgo sufro un percance.‭" (El pez)
  • "El padre en el mar y el hijo a rezar.‭" (El pulpo y el púlpito)
  • "Si dejas atrás la playa ella te mantiene a raya.‭" (La raya)
  • "Del mar a la tierra y de la tierra al mar ella va y viene y cuanto más rota está menos agujeros tiene.‭" (La red)
  • "En el mar es donde vivo, plateado es mi color, cruzo veloz como el rayo, adivina quien soy yo.‭" (La sardina)
  • "En el mar formamos bancos, azul soy entre los pescados, plato exquisito del gato y en conserva terminamos.‭" (La sardina)
  • "Olas me llevan, olas me traen, pero las velas nunca se me caen.‭" (El velero)
  • "Ni de día, ni de noche puede mi vela alumbrar, pero cuando sopla el viento muy bien suelo navegar.‭" (El velero)
  • "En un puerto hay tres barcos, uno es un crucero, otro un trasatlántico y el otro ya te lo he dicho.‭" (El yate)
  • "Olas me llevan, olas me traen, pero las velas nunca se me caen.‭" (El velero)